El gobierno de Estados Unidos anunció hoy que impuso sanciones a Birmania (Myanmar) luego de que las fuerzas armadas de ese país tomaron el poder hace más de una semana mediante un golpe de Estado y detuvieron a varias personalidades políticas, entre ellas la gobernante de facto, Aung San Suu Kyi. Fue el presidente Joe Biden quien anunció que había emitido una orden ejecutiva que impedirá a los generales de Birmania tener acceso a activos por valor de mil millones de dólares en Estados Unidos, una sanción que, según el propio mandatario, podría estar en otras más.
’Las fuerzas armadas deben ceder el poder que tomaron y demostrar respeto a la voluntad del pueblo de Birmania’, indicó el mandatario estadunidense. El gobierno militar de la nación asiática cambió el nombre del país en 1989, de Birmania a ’Unión de Myanmar’, un hecho que no es avalado por todos los habitantes en esa nación. Biden aseguró que las sanciones congelaron las cuentas de líderes militares de Birmania, pero que no afectarán la entrega de ayuda para programas de salud, de sociedad civil y otras áreas en beneficio del pueblo. Añadió que su administración identificará los objetivos específicos de las sanciones en los días venideros. ’El pueblo de Birmania se está haciendo escuchar ante la mirada atenta del mundo (...) Estamos dispuestos a tomar medidas adicionales y seguiremos colaborando con nuestros socios internacionales para exhortar a otras naciones a que se nos unan en estas gestiones’, agregó. Antes de las palabras de Biden, estallaron de nuevo protestas multitudinarias en las calles de Birmania en contra del golpe de Estado, incluso después de que las fuerzas de seguridad intensificaron sus medidas represivas y allanaron la sede del partido de Suu Kyi. Queda por ver si las sanciones de la Casa Blanca harán mella en el régimen militar birmano, muchos de cuyos militares ya son sujetos de penalidades por los ataques contra la comunidad musulmana rohinya. El líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, partidario de Suu Kyi, declaró que aprecia la política de Biden ’de buscar ayuda del Congreso para tomar medidas rápidas y prácticas para restaurar la democracia en Birmania". "Espero que todas las naciones que respeten la democracia y el Estado de derecho se unan a Estados Unidos en imponer penalidades a la junta militar", dijo el senador.
