BUHEDERA: Sincera

“Amor, ¿quieres ir al cine y ver la de Supermán?” “No, prefiero quedarme a ver la tuya.”



NOTICIAS DEL IMPERIO

“En EU hoy, las leyes federales son tan numerosas y están tan amplia y vagamente redactadas, que es prácticamente imposible para cualquier ciudadano pasar un solo día sin quebrantar al menos una de ellas. En muchos casos, esas infracciones accidentales estipulan penas severas y hasta cárcel. Especialmente en riesgo están los dueños de empresas, obligadas a cumplir con una constelación de normas imposible de conocer, ya no digamos de respetar. Para exigir esa nube de leyes existe un enorme aparato gubernamental de prisiones, jueces, fiscales, policías y burócratas perfectamente financiado, implacable, todopoderoso y casi imposible de enfrentar en tribunales.”



HOY LAS CIENCIAS ADELANTAN…

Sobre el recurrente comentario acerca de que los adelantos tecnológicos amenazan con crear desempleo masivo, me dice el Gustavo Cortés Campa: “La importación de burros desde España hizo desaparecer en Mesoamérica el oficio de ‘tameme’, bestia humana de carga, porque en América no había animales que hicieran el trabajo de cargar bultos. En el siglo XV, al difundirse el (re) invento de Gutenberg, el gremio de calígrafos y copistas elevó una airada protesta porque la máquina impresora dejaría sin chamba a miles de agremiados y sus familias morirían de hambre. Antes, en los puertos griegos los estibadores y alijadores estaban furioso porque ese invento diabólico de la polea los iba a dejar sin trabajo. Los luditas, en el siglo XVIII, entraban en las fábricas con marros para destruir la máquina lanzadera de tejer, porque enviaría a la extinción a hilanderas y tejedores. A principios del siglo XIX, en Inglaterra, jornaleros agrícolas también se dedicaron a destruir los primeros tractores para trabajo agrícola porque les dejaría sin ese empleo terriblemente agotador y mal pagado. En los últimos años, las computadoras dejaron sin chamba a mucha gente, pero crearon todavía más empleos. Por ejemplo, en los años 60, se había creado el oficio de ‘perforadora de tarjetas’ que poco después de convirtieron en ‘capturistas de datos’. Steve Jobs inventó la PC y dejó pasmados a los de la IBM, que se habían creído los amos absolutos del negocio. A la pesada computadora de escritorio siguió la ‘laptop’, que ya es obsoleta, con el ‘smartphone’, el que a su vez desplazó a la ‘tablet’ con apenas unos diez meses de vida. La telefonista de las empresas u oficinas gubernamentales es una señora jubilada de 80 años, sustituida por sistemas automatizados para responder llamadas; lo mismo esos personajes pintorescos que eran los elevadoristas, enclaustrado de por vida en ese espacio metálico, ruidoso, mal iluminado y ventilado, de un metro por un metro, a cargo de la tremenda responsabilidad de mover la palanca para subir o bajar el aparato (lo que ahora hacen los mismos usuarios oprimiendo el botón correspondiente). ¿Qué decir de aquellos linotipistas, que llegamos a conocer nosotros, pero que para personas de 40 años son personajes de fábula, que quizá no existieron? Y los formadores de la ‘rama’ metálica, de donde se extraía la ‘prueba de agua’ de los periódicos para ‘corregir galeras’.

Hay jóvenes que cuando llegan a ver una máquina de escribir se hacen lenguas para adivinar cómo demonios se podía escribir en este aparato tan raro. La Kodak quebró y en Brasil quedaron decenas de miles en el desempleo. ¿Quién que hoy tenga 30 años o menos pudo saber de la cámara ‘Instamatic’, el servicio de ‘revelado en una hora’, los rollos de película infaltables para las vacaciones, y la asombrosa novedad de la Polaroid, que generaba una foto impresa en menos de un minuto? El cuento del ‘desastre’ de la eliminación gradual de la mano de obra es repetitivo, cuanto más imbécil. También habría que mencionar la gran bendición de la Word Perfect, que nos liberó de tantas secretarias (y que el SAT, esa nueva inquisición, ha vuelto a hacer imprescindibles para muchos profesionistas antaño independientes).”

OOOOOOMMMMMM

Recuerda meditar cuanto puedas, cuando puedas.



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