INICIATIVA QUE REFORMA LA LEY DE PROTECCIÓN Y TRATO DIGNO PARA LOS ANIMALES
En la Sesión Ordinaria número 104 en el Pleno del Congreso del Estado de Hidalgo, la Diputada Claudia Lilia Luna Islas presentó una iniciativa para reformar la Ley de Protección y Trato Digno para los Animales en el Estado de Hidalgo.
Durante la exposición de motivos, la legisladora señaló que ’los derechos de los animales tienen que ser defendidos como se defienden los derechos humanos’, además de que es necesario desarrollar sensibilidad por el respeto a cualquier forma de vida. Añadió una referencia de la Declaración Universal de los Derechos de los Animales de 1978, en la cual se establece en su artículo 3° que: ’...Ningún animal será sometido a malos tratos ni a actos crueles. Si es necesaria la muerte de un animal, ésta debe ser instantánea, indolora, y no generadora de angustia…’. A esto agregó que, con base en estadísticas de INEGI, 7 de cada 10 personas son cuidadoras de al menos una mascota en sus hogares, no obstante se enfatiza que de las 28 millones de mascotas que se estiman, 70 por ciento se encuentran en la calle por abandono, esto de acuerdo con información de la Asociación Mexicana de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies Asociación Civil, AMMVEPE A.C.
Estableciendo que no se busca imponer el amor a los animales, sino fomentar el respeto hacia la vida animal, es en este sentido que la Diputada Claudia Luna busca modificar la Ley de Protección y Trato Digno para los Animales en el Estado de Hidalgo. Utilizando ejemplos de animales que han sido maltratados y abusados sexualmente en los últimos meses, es que la Ley, de acuerdo a la propuesta, puede contemplar como crueldad y maltrato contra cualquier animal el abandono en espacios públicos o privados y los actos de zoofilia, en tanto que para las mascotas, se considerarán actos de la misma naturaleza, tenerlos en azoteas o terrazas sin condiciones de seguridad e higiene apropiadas; atarlos, amarrarlos, sujetarlos o inmovilizarlos temporal o permanentemente sin justificación; no proporcionarles el espacio suficiente para su movilidad y esparcimiento; descuidar la vivienda para ellos y sin ventilación o higiene; atentar contra su salud ya sea por insolación, falta de agua o por cualquier otro acto con dolo; no alimentarlos adecuadamente y de forma suficiente cubriendo sus necesidades vitales; y mutilar sus extremidades o realizar acciones que limiten sus capacidades, como el vuelo, en el caso de las aves.
Las sanciones administrativas, con base en la gravedad y en la reincidencia, podrán ser desde un acta administrativa, hasta el arresto hasta por 36 horas, y en su caso, el aseguramiento de los animales. Las organizaciones dedicadas a la defensa y protección animal que desarrollen la infracción, podrán perder los permisos de funcionamiento.
