EL CHOQUE YUNES-FIDEL
RAMÓN ZURITA SAHAGÚN
El enfrentamiento político-judicial era esperado y los contendientes se declaran listos para efectuarlo.
Fidel Herrera Beltrán y Miguel Ángel Yunes Linares se detestan y en su confrontación son capaces de todo, sin importar a quien se llevan en la colisión.
Son muchos años de disputa que con razón o sin ella, los dos veracruzanos se ensañan uno contra el otro.
Los dos son inteligentes, hábiles, preparados y con una gran dosis de perversidad política, que los transforma en cuanto asumen ese papel.
Durante muchos años, Fidel superó a Miguel Ángel, ya que consiguió ser gobernador antes que él y eso provocó ira en su contendiente. Miguel Ángel intentó ser su sucesor para pasarle el cobro de facturas pendientes y no pudo, la habilidad electoral de Herrera Beltrán lo superó, con todo y que su adversario en las urnas resultó ser un flan.
Yunes Linares no pudo superar ese trago amargo y aumentó el rencor contra el de Nopaltepec y hoy que se convirtió en gobernador, aunque sea por dos años, quiere saldar cuentas pendientes con Fidel.
La tarea no es sencilla, ya que Fidel dejó de ser gobernador desde el primero de diciembre de 2010 y son muchos los años transcurridos en los que, la posibilidad de fincarle responsabilidades como gobernante son mínimas.
Yunes Linares aprovecha el desastre de gobierno de Javier Duarte de Ochoa, para enderezar sus baterías en contra de Fidel y responsabilizarlo de todo, en una tarea donde se juega mucho.
De inicio mete en el mismo paquete a Fidel y Duarte en las denuncias sobre el supuesto uso de agua y otras sustancias no medicinales que se usaban para tratamientos contra el cáncer, el sida y otras enfermedades.
Hasta el momento no existen pruebas de ese uso indebido o del fraude con esos supuestos medicamentos, pero se trata de llevar a Fidel ante las instancias judiciales, sin importar el medio o los métodos.
También se le señala por otras irregularidades cometidas, supuestamente, en su sexenio, por lo que el ex gobernador de Veracruz renunció al cargo de Cónsul en Barcelona, una posición política y diplomática que lo mantenía alejado de Veracruz, pero en contacto con el acontecer político.
Fidel anuncia que dos son los motivos para dejar esa misión diplomática, defenderse de las acusaciones que hace Yunes Linares sobre su persona y hacer política interna.
El choque de trenes está anunciado. Fidel y Yunes lucharán en esta contienda electoral por la renovación de más de 200 ayuntamientos en el estado de Veracruz, reviviendo viejas luchas.
Alguna vez, los dos veracruzanos el de Soledad de Doblado y el de Nopaltpec militaron en el mismo partido y hacían política juntos, pero de aquellos dorados años 80, ya pasó mucho tiempo.
Fidel con más carrera política llevó a Yunes con Patricio Chirinos Calero, el veracruzano más cercano al afecto del entonces candidato presidencial y después Presidente de México, Carlos Salinas de Gortari.
Yunes fue postulado como candidato a diputado federal y perdió ante Marcela Lombardo la hija del fundador del PPS, Vicente Lombardo Toledano.
Fidel lo acercó al entonces secretario Chirinos Calero y se hizo indispensable del mismo y relegó a Fidel de ese contacto.
Cuatro años después de eso, Chirinos Calero fue postulado candidato al gobierno de Veracruz y a su triunfo nombró a Yunes Linares secretario de Gobierno y después presidente estatal del PRI, en un intento por posicionarlo como su sucesor.
La estrategia no funcionó, ya que el PRI con Yunes Linares como dirigente estatal perdió las principales alcaldías y diputaciones locales, en aquel 1998.
El candidato a suceder a Chirinos Calero fue Miguel Alemán Velasco y al poco tiempo Miguel Ángel se enroló dentro del equipo de Roberto Madrazo Pintado y Elba Esther Gordillo que ganó la dirigencia nacional del PRI.
Cercano al afecto de la maestra, Yunes fue el abogado del partido y representante ante el IFE y diputado federal en la LIX legislatura.
La renuncia de Elba Esther a la coordinación de diputados priistas lo alejó del priismo y le permitió ser incorporado a tareas del gobierno federal, dominado por un Presidente panista.
Tutelado por la maestra, fue director del ISSSTE en la época calderonista y se hizo militante del partido blanquiazul, renunciado a la posición para competir por el gobierno de Veracruz en 2010.
Fue su tercer intento por convertirse en gobernador de su estado natal, ya que en 1998, Miguel Alemán le ganó la partida y en 2004, Fidel se le cruzó en el camino, cuando estaban dadas las condiciones para que Miguel Ángel fuese el abanderado del PRI.
Lo ocurrido en 2004 fue el principal tema para salirse del partido y tomar distancia de Roberto Madrazo, situación que se había iniciado con el rompimiento entre Madrazo y Elba Esther.
Mientras eso sucedía Fidel desde el Senado de la República se posicionaba rumbo a Veracruz y negoció a marchas forzadas para que saliera ungido como candidato.
Lo demás es historia, Miguel Ángel se mantuvo pendiente de cada paso de Fidel, lo cuestionaba por cada acción de gobierno, lo denunciaba y acusaba de todo y más cuando Herrera Beltrán optó por un joven como Javier Duarte de Ochoa, sin carrera política, pero obediente con su jefe, con el que rompió al tercer año de gobierno.
Yunes quiso aprovechar el distanciamiento, aunque finalmente no le funcionó.
Ahora los dos contendientes, Fidel-Miguel Ángel se encontrarán nuevamente y ambos llevan mucho en sus alforjas, donde también se juega el futuro de sus vástagos, políticos con aspiraciones de gobernar Veracruz.
Miguel Ángel y Fernando Yunes Márquez, por un lado y Javier Herrera Borunda, por el otro.
Email: ramonzurita44@hotmail.com
