BUHEDERA: Sarcasmo

Guillermo Fárber/

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BUHEDERA: Sarcasmo

BUHEDERA: Sarcasmo
Periodismo
Julio 24, 2014 10:06 hrs.
Periodismo Estados › México Estado de México
Guillermo Fárber/ › todotexcoco.com

Un matrimonio iba en auto por un camino rural, molestos uno con el otro. De pronto pasan por una granja en la que se veían vacas, cerdos, cabras y mulas. “¿Parientes tuyos?”, pregunta sardónicamente el marido. “Sí”, contesta la esposa tranquila, “parientes políticos.”



MERITORIO

Tengo 206 huesos, 650 músculos y 50 mil millones de células. La verdad, levantar todo eso de la cama un lunes ¡no es nada fácil!



DAÑOS COLATERALES

Las víctimas del misilazo ucraniano contra el vuelo MH17 no fueron sólo los 295 que perecieron en la tragedia; serán varios miles más si se cuentan los empleados de la aerolínea Malaysia Airlines, que parece haber recibido la puntilla después de tres años de pérdidas financieras importantes, y de la desaparición hace cuatro meses del vuelo MH370 de Kuala Lumpur a Pekín (avión que según alguna hipótesis conspiratorias se encuentra secuestrado en la base gringa de Diego García). “Malaysia Airlines vuela hacia la quiebra y podría desaparecer este mismo año. La compañía sufre pérdidas millonarias ante la huida masiva de clientes, pues afronta la mayor crisis de popularidad sufrida por una aerolínea en la historia. Por primera vez en la historia una misma aerolínea sufre dos catástrofes en un mismo año. Antes, la aerolínea solo había registrados dos incidentes mortales desde que se fundó en 1937, y antes de igualar esa cifra en un mismo año, la compañía asiática era una de las más seguras y mejor valoradas del mundo. Su prestigio ayudó a incrementar el alcance de la compañía en cuanto a vuelos internacionales, y su eficiente servicio le reportó más de cien premios internacionales.” Ni modo, la ganadora (involuntaria, aclaro) será su acérrima rival Singapore Airlines (Syarikat Penerbangan Singapura), que transportó 18 millones de pasajeros en 2012.



CONTRAINDICACIONES

La risa es la mejor medicina, siempre y cuando la enfermedad no sea una diarrea.



CONFIANZA

El gran equilibrista había tendido una cuerda desde un borde al otro de un precipicio. Se aprestaba a hacer su demostración y la multitud, situada abajo, esperaba ansiosa. “¿Creen que puedo cruzar al otro lado caminando por la cuerda?”, preguntó el artista. “¡Sí!”, contestó la multitud.
Y allá fue el hombre llegando a la orilla opuesta en medio de los aplausos y el bullicio. “¿Creen que puedo cruzar al otro lado llevando una carretilla?” “¡Sí!”, se escuchó nuevamente. “Ahora, ¿creen que puedo cruzar llevando una persona en la carretilla?”, preguntó. “¡Sí!”, fue nuevamente la respuesta. Entonces el artista dijo: “¿Quién es voluntario para subir a la carretilla?” Se hizo un silencio total. Todos se estremecieron. Todos temieron. Todos creían siempre y cuando no estuviera en juego su seguridad personal. En realidad no creían. Confiaban en él, pero no tanto como para poner su propio pellejo en juego.

LITERAL

¿Quién fue el idiota que dijo que se viajaba mejor en primera? ¡Acabo de quemar el motor del auto!



TEPOZTÉCATL

Este curioso episodio del semidios prehispánico ilustra muy bien la diferencia entre fondo y forma, sustancia y contingencia, esencia y accidente, ser y parecer. Después de cierta hazaña, “fue recibido al son del teponaztli y la chirimía, pero como iba con las ropas sucias no le dieron comidas suculentas; y cuando lo recibieron con vestiduras apropiadas para la fiesta, y se presentó limpio y vestido, le ofrecieron tamales, moles y otras viandas magníficas. Él sin embargo no quiso tomarlas sino que las arrojó sobre sus vestiduras diciendo: “A mí no me dieron de comer bien, sino cuando vine bien vestido, por lo que es a mis ropas a las que ustedes agasajan y festejan, por lo que vertí sobre mis vestidos la comida preparada.”



PREGÓN COMERCIAL

¡Pásele, pásele, marchantita, tenemos todas las tallas, desde la talla Barbie hasta la talla Barney!

OOOOOOMMMMMM
Recuerda meditar cuanto puedas, cuando puedas. Se le preguntó al Buda: “¿Qué has ganado con la meditación?” Él respondió: “Nada. Más bien he perdido: la ira, la ansiedad, la depresión, la inseguridad, el miedo a la vejez y a la muerte.”

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