Más sobre el pan

Carlos Ravelo Galindo

En las Nubes

Más sobre el pan

Más sobre el pan
Política
Agosto 29, 2014 10:15 hrs.
Política Nacional › México Ciudad de México
Carlos Ravelo Galindo › diarioalmomento.com

Es de risa, sin duda alguna: No olvidamos todavía que a dos prominentes panistas los “despojaron” de sus encargos, en la Cámara de Diputados, por bailar, beber y algo más en Puerto Vallarta. Los criticaron, los vilipendiaron. Vaya hicieron escarnio por una noche de bohemia, a la que todos tenemos, de vez en vez, derecho. Y ahora a Luis Alberto y a Jorge, los recibieron como héroes en el seno del partido. Nadie los entiende. Por un lado critican el bailongo, la beberecua y no se qué otra ”frivolidad”, y por el otro, ya en familia, los aplauden a rabiar. Y aún más: le gritan al primero “Mucho Güerito”, por su faena en enero último. Perdónese la comparación, pero sucedió igual que en Nayarit, en donde el pueblo, vaya sus simpatizantes, ungieron de nuevo como edil, a quien aceptó “haber robado, pero poquito”. A unos, en privado les aplauden su fiesta. Y al otro, en público, le aceptan su fechoría. A cada quien lo suyo. Y ya que hablamos del pan caería bien algo de cultura sobre otras piezas, amén de los bizcochos.
¿Sabes cuando nace el bolillo? El bolillo o birote salado es de origen Francés. Fue introducido a México por un cocinero de la corte de Maximiliano de Habsburgo. Tiempo después fue llevado a Guadalajara en donde el birote tuvo mucho éxito. Se hizo típico por su calidad. El nombre de "birote" proviene de una familia que vivía por avenida Vallarta de apellido Birrott, quien lo producía y la gente de la época decía: "Vamos con los birrotes". Es así como el nombre se fue transformando hasta llegar a "birote". Y luego la torta con aceite de oliva, queso añejo, bien apretadita. Creada, en México, por los tenderos hispanos.
¿O el Croissant? La elaboración del popular cuernito (croissant), surgió con la defensa del imperio austríaco ante el asedio otomano en el siglo XVII. Según se cuenta, un panadero de Budapest lo preparó por primera vez en 1686 durante el sitio de la ciudad por parte de los turcos otomanos. El relato establece que una noche, mientras preparaba la masa, el tahonero escuchó ruidos extraños y alertó a los militares que tenían a su cargo la defensa de la ciudad. Al tomar cartas en el asunto, los soldados descubrieron que los enemigos cavaban un túnel bajo las murallas y gracias a la advertencia, los turcos fueron derrotados. Para conmemorar la victoria, aquél elaboró un pan en forma de luna creciente, símbolo del Islam. Implica que los patriotas austro-húngaros se “comieron” a los turcos. Vaya, el común y corriente “cuerno”, pero chirris. Algo asimilar, y guardamos toda proporción, con los amigos de las cámaras y recámaras.
craveloygalindo@yahoo.com.mx

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