Necesito un donante de sueldo ¡ya! / El corazón de la Duquesa de Alba ha dejado de latifundir. / En la vida todo es pasajero, menos el chofer. / Escucho gente muerta. Y suenan de poca madre; Jimi Hendrix, John Lennon, Bob Marley, Michael Jackson... / Quise ahogar mis penas en el licor, pero las condenadas aprendieron a nadar. / “¿Nervioso?” “Sí, un poco.” ¿Es tu primera vez?” “No, ya había estado nervioso antes.” / Esposa: a veces siento que duermo con un extraño. Esposo: qué suerte porque yo siempre siento que duermo contigo. / Yo no tengo Twitter ni instagram ni Facebook. Por eso grito por la calle mis problemas, lo que voy a comer o a dónde voy. Y resulta que ya hice tres amigos: dos policías y un psiquiatra. / Ir al gimnasio y luego comerte un pastel. En esto reside la dualidad, el equilibrio, las fuerzas opuestas. Esto a lo que yo denomino el gym y el yam. / Me duele la mano de tanto pensar en ti.

COLAPSO GLOBAL

Mi ingreso en el club de los catastrofistas tiene fecha exacta: abril de 1994. Por una serie de razones pasé dos largas y aburridas semanas en EU. Allá compré y literalmente devoré el libro que me sirvió de pasaporte a esta nueva dimensión: Bankruptcy 1995: The Coming Collapse of America and How to Stop It de Harry E. Figgie. “Una explicación sobre cómo EU se ha colocado al borde del precipicio a menos que se adopten medidas drásticas, y lo que la quiebra nacional significará para los ciudadanos de este país.” El libro se refería al ya entonces escandaloso endeudamiento público de EU. Nunca terminaré de agradecer al destino la inmensa ventana que este libro abrió a mi mente al comenzar a quitarme la inocencia financiera global. Han pasado veinte años de la fecha anunciada para el colapso y por supuesto no se tomaron las medidas recomendadas por Figgie (uno de los mega empresarios convocados por el presidente Reagan en la Comisión Grace para poner algún asomo de orden en el gasto público gringo). Al contrario, la montañas de deuda que dejaron los mandatarios gringos de Bush Papá para atrás, se multiplicó descomunalmente tras 8 años de Clinton, 8 de Bushito y desde luego los épicos 6 que van de Obama. En ese entonces Figgie demandaba atención urgente al problema, pero según él las cosas aún podían más o menos parcharse. Con mucho dolor, pero aún podían arreglarse. Yo lo dudaba. Y bueno, hoy hasta los mega optimistas como Figgie aceptan que hace buen rato que pasamos el punto de no retorno. El súper colapso es ya desde hace años inevitable. Es cierto que entre morir hoy y morir mañana, es mejor morir mañana, pero la certeza de la muerte financiera global es absoluta. Mientras esa fecha fatídica llega, no nos queda sino divertirnos contemplando la profusión de trucos que el Casino Global se saca de la manga para posponer el derrumbe final. Sí, ya se: se llama morbo. En fin, como decían los antiguos: las cosas de Palacio van despacio.



LOQUITO CÉLEBRE

“Pero qué nos importa la opinión de la gente fría, siempre que nuestras almas, más ardientes y más nobles que las suyas, sepan disfrutar de lo que ellos no perciben.” Marqués de Sade.



OOOOOOMMMMMM

Recuerda meditar todos los mediodías. Un minuto al menos. Cada día somos más. Entre todos estamos creando un mundo más armónico, pacífico y generoso. “La meditación utiliza la mente disciplinada para entrar en contacto con el alma y conocer la voluntad de Dios. Tanto la plegaria como la meditación son de naturaleza invocativa.” Se le preguntó al Buda: “¿Qué has ganado con la meditación?” Él respondió: “Nada. Más bien he perdido: la ira, la ansiedad, la depresión, la inseguridad, el miedo a la vejez y a la muerte.”


FESTIVAL CULTURAL MAZATLÁN
De octubre 9 a diciembre 20: carnaval del espíritu y la mente.


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