¿Qué tal celebró la Noche Buena y cómo la va a pasar en Navidad?

Como debe ¿no?

¿Y desde luego también el Fin de Año?

Después de todo un año de chinga, es lo menos que se merece ¿no?

No me vaya a salir que el “aguinaldote” que recibió, –si fue de los afortunados–, no le alcanzó.

Fueron 996 pesotes y a otros más suertudos, hasta les dieron nueve pesos más.

¿Qué más se necesita?

Con esa “fortuna” es obvio que resultó más que suficiente para suculentas viandas, vinos caros, confituras, latería, ensaladas y, desde luego, los platillos que se acostumbran en estas fechas:
Pavo, Pierna, Romeritos, Bacalao y demás manjares que disfrutará en las dos cenas: Noche Buena y Año Nuevo y seguramente hasta le quedará para el “recalentado”.

Y aquellos que no malgasten, que sepan administrarse, les alcanzará hasta para la llegada de Los Reyes Magos; a los jodidos no los visita Santa Claus.

Los que sí están en un brete porque no saben qué hacer, son los servidores públicos, incluido el señor presidente de la República (porque en teoría es también nuestro empleado), los secretarios de Estado, diputados, senadores, magistrados, ministros, consejeros electorales y demás funcionarios de alto nivel.

Y es que…¿Sabe usted? Nada más les dieron medio milloncejo de pesos, aproximadamente, de “aguinaldito”.

¿Se imagina qué podrán hacer con esa miseria, aquellos que se gastan en una comida miles de pesos?

El mandatario de la Nación, Enrique Peña Nieto recibió como aguinaldo 76 mil 817 pesos, más una gratificación de fin de año de 319 mil 628 pesos, es decir, 396 mil 445 pesos.

Los secretarios de Estado recibieron una cantidad casi igual, pero menor.

Los diputados, 199 mil 887 pesos y los senadores 234 mil 330 pesos.

Pero el Jefe del Ejecutivo no es el que mayor aguinaldo recibió; en este país, paradójicamente, quien lleva las riendas de la Nación no es el más importante como para recibir el mayor salario.

Hay una privilegiada cofradía de toga y birrete (magistrados, ministros, consejeros) que son los que mayor aguinaldo recibieron.

El presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y los otros 10 ministros que conforman el máximo tribunal de justicia de nuestro país, tuvieron un aguinaldo de acuerdo a su sueldo base, desde luego con gratificaciones, bonos, y “merecidos” estímulos extras.

La bicoca que recibieron fue de apenas 518 mil 757, pero dada su importantísima labor (recordemos Lydia Cacho, Guardería ABC, Florence Cassez y Raúl Salinas de Gortari, entre muchos otros casos), ya está contemplado para el 2015 un justo y meritorio aumento de otros 67 mil 692 pesos, es decir que para las fiestas decembrinas del próximo año dispondrán de 586 mil 449 pesillos.

Los altos funcionarios de la Auditoría Superior de la Federación, del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, consejeros electorales, ya sean federales o nacionales y demás funcionarios de alto nivel, también recibieron de aguinaldo una cantidad similar.

Desde luego, siempre habrá inconformes que no estén de acuerdo con esas “pequeñas” diferencias salariales, sobre todo aquellos que ganan (¿?) 63.77 pesos diarios o 67.29, a los 2 mil que perciben los indispensables funcionarios.

Eso sí, con los tres pesos del nuevo aumento que no sirven ni para un boleto del METRO, el sueldo mínimo rebasará los 70 pesos ¿qué más quieren?

Pero qué le vamos a hacer y como dijera el filósofo de Güemes, “Y TODO POR NO ESTUDIAR”.***AU REVOIR.
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