El poder cegador de la música

Andrés Mauro Campuzano Marquina

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El poder cegador de la música

El poder cegador de la música
Cultura
Septiembre 07, 2015 23:13 hrs.
Cultura Estados › México Guerrero
Andrés Mauro Campuzano Marquina › codice21.com.mx

En mi infancia era muy raro escuchar música que hiciera apología a la violencia, lo único violento de esa época era el baile de “quebradita”, que por su difusión y popularidad era ejecutado con destreza por jóvenes y adultos, pero no era un ejercicio erótico, ninguna connotación sexual tenía el baile como ahora lo tiene el reggaetón.

Niños, niñas, jóvenes y adultos se contonean frenéticamente en poses sexuales y letras que inducen a la degradación de la mujer, la depravación como sensualidad. En el recuerdo infantil no encuentro un género musical tan violento y sin pudor alguno como el reggaetón.

Acapulco Tropical, The Beatles, Michael Jackson, Luis Miguel, Magneto, Nirvana, Pearl Jam, Joan Sebastian, Juanello, Santana, Juan Luis Guerra, Koyuka 2000, Beethoven, Mozart, Schubert, Smashing Pumpkins, Silverchair, son algunos ejemplos de la música a la tuve acceso a temprana edad y luego en la adolescencia. La aplicación Spotify, que ofrece música sin necesidad de descargarla y con más de 75 millones de usuarios en el mundo indica en su sitio web que las preferencias musicales de sus usuarios en Acapulco son: El Kommander, Cuitla Vega, Banda Clave Nueva y La Adictiva.
Deezer, otro sitio que ofrece música en línea ubica las preferencias musicales de sus usuarios con: Banda Sinaloense MS, Julión Álvarez, J. Balvin, La adictiva, La Arrolladora, Calvin Harris.

Es importante subrayar que el playlist sobre Acapulco indica que la banda, el corrido alterado son los géneros que más usuarios prefieren, que ejemplifica terriblemente el contexto de violencia cotidiana en el puerto más importante de Guerrero. Consiste en una especie de congregación y no religiosa, Acapulco es una de las ciudades más violentas en el mundo, recientemente el Gabinete de Comunicación Estratégica, dio a conocer los resultados de la encuesta realizada sobre “Las Ciudades más habitables de México”, la percepción y sentimiento de los ciudadanos sobre el lugar en que viven, se tomaron en cuenta tres indicadores: calidad de vida (INCAV), satisfacción del desempeño de alcaldes (IDEALC), satisfacción con los servicios (ISACS). Ubicando a Chilpancingo y Acapulco con las peores calificaciones, si la violencia no es lo suficientemente estridente a nivel mundial, en Guerrero seguimos ocupando los primeros lugares en hacer todo mal.

Escuchar reggaetón, narco corridos, no te hace criminal, afirmar esto sería discriminador tanto como decir que los tatuajes o la forma de vestir criminalizan y no es así. Pero la música tiene un poder cegador, recuerdo que en el refrigerador mi mamá tenía un letrero que sentenciaba: “Tu eres lo que comes, así que come cosas ricas”. Lo mismo se aplica a la música, escuchar una canción del Kommander que pregona:

“Reina creo que me vienen siguiendo
Detenme el bucanas les voy atorar
Reina hermosa pásame mi cuerno
Bríncale al volante y no mires pa' tras
Cortaba cartuchos seguía rafageando macizo
Montado en mi raptor no podía blanquear
Me traiban cortito no podía rajarme
Ya andaba emperrado tenía que matar”

El grupo Calibre 50 que aparece también en la lista de popularidad declama una poesía fresca e integradora de la equidad de género:

“Hoy te voy a decir, la verdad de mi
Que no soy quien crees
Que en la intimidad, soy un animal
Que no sabe entender
Ya no me va a importar
Si mancho la cama
Con mi intensidad
Si no tienes ganas te voy a meter
La idea de lo que te quiero hacer
Porque mi cuerpo se quema de tanta pasión
Que borre en mi mente la imaginación
Ahorita te aclaro, que el tierno se fue”.

El vídeo de esta canción cuenta con 35, 939, 159 reproducciones en la red social YouTube y casi 100 mil pulgares arriba. Otra canción que la mayoría de feministas aplaudiría porque recoge el espirítu de su pugna sería “Todo se me olvida”, de El Viejo Paulino:

“No cueces bien los frijoles
Tu sopa parece engrudo
no sabes guisar un huevo
Y el caldo te sale crudo
Nunca barres la cocina
Ni limpias bien el menudo

Tú sabes bien que a los hombres
Con un guiso se nos gana
Nunca me haces un café
Temprano por la mañana
Pero todo se me olvida
Cuando estamos en la cama”

Estos lamentables ejemplos de canciones que hacen de las ejecuciones, la violencia y la misoginia un atributo y no algo despreciable indica que en Acapulco efectivamente son lo que escuchan, la mayoría de usuarios de plataformas musicales en internet de Acapulco y Chilpancingo demuestran al mundo que lejos de reprobar el asesinato diario, la extorsión, el secuestro, golpear a una mujer y verla simplemente como una entidad carente de derechos, un saco que se puede golpear, a través de la música le dan legitimidad a todo eso.

Durante la Alemania NAZI de Hitler, los ciudadanos veían como los judíos eran transportados a los campos de concentración para ser exterminados y lo aceptaban por omisión o simpatía a los NAZIS, pudieron ayudar a escapar a algunos de esos trenes, simplemente alimentarlos, aventarles bolsas con agua pero escogieron ser cómplices y en Acapulco y Chilpancingo quienes fomentan ese tipo de -algo mal llamado- música, son parte de ese espiral que día a día consume vidas humanas.

Todo lo malo lleva la delantera en Guerrero, con los niveles de inseguridad, pobreza, marginación, migración, desempleo y ciudadanos que tienen acceso a internet y consumen música que hace de la violencia un hábito doméstico. Si un niño observa que en su familia los narco corridos son gustos habituales, ese niño tiene probabilidades de repetir un patrón de conducta que no le abona en nada a la democracia. ¿Qué tipo de ciudadanía se fomenta con esta música? ¿Qué hábitos familiares en Guerrero han cambiado radicalmente?

La violencia y misoginia no es privativo de estos géneros musicales, existen también en el rock, pop, alternativo, pero los datos que arrojan los sitios mencionados apuntan hacia la dirección de la banda y los narco corridos. La música de Schubert relaja, favorece el buen humor, te lleva a reflexionar muchos doctores a la hora de realizar una intervención quirúrgica que duran muchas horas ponen música clásica como un instrumento más en la sala de operación, en mi vida académica no conocí a un doctor en ciencia política, sociólogo, administrador que gustara de los corridos alterados, lo que me lleva a considerar que las preferencias musicales forman un sesgo intelectual. Alguien que escuche el Kommander difícilmente tendría alguna inclinación a leer La Divina Comedia de Dante, o simplemente leer algún libro.

En Guerrero se están haciendo mal varias cosas, apuntalar la música que esa gran mayoría debería aborrecer es algo que debe preocuparnos y ocuparnos. No criminaliza escuchar esa música, pero tampoco contribuye de manera positiva al drama que es Guerrero, si las listas de preferencia musical de esas plataformas indicaran que la música clásica, música regional de Guerrero, las baladas, el pop y el rock encabezaran las listas invariablemente se describiría otro tipo de sociedad.

El gobernador electo Héctor Astudillo, pudiera incentivar un cambio progresivo fomentando conciertos musicales con cantantes y grupos de fama nacional o internacional firmando un convenio en el que el gobierno proporcioné la infraestructura y los cantantes participen sin cobrar para contribuir a un cambio urgente, por lo preocupante de la situación muchos grupos musicales y cantantes se unirían a un festival que tiene por fin incentivar la cultura y el turismo tanto en Chilpancingo, Acapulco y otros municipios o comunidades de Guerrero. Si se hace con artistas desconocidos el proyecto no concluirá su destino. Centro Internacional Acapulco, Fórum del Mundo Imperial, Zócalo, Auditorio Sentimiento de la Nación, un amplio catálogo de artistas. Imaginen a Alondra de la Parra con la Orquesta Filarmónica de Acapulco, Metallica con la OFA, Alejandro Sanz, Pearl Jam y miles de etcéteras.

Imaginen por un instante que el actual gobernador de Guerrero y alcalde de Acapulco decantaran su gusto por la música del Kommander ¿Verdad que a nadie le parecería adecuado? Vaya ni a las personas que les gusta esa música podrían aceptar esos gustos de parte de sus gobernantes.Y si la situación sigue en el impase, no queda más que referirnos a la frase coloquial tan citada por uno de mis mentores: “Cuélguense, pero no se columpien”.

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