Descubrir a tus verdaderos amos es fácil; simplemente ve a quién tienes prohibido criticar. (Los mexicanos antes, en la era de la Dictadura Perfecta, no podíamos ni soñar en criticar al Señor Presidente. Hoy, desde Fox, puedes trapear con ellos. ¿Pero de quién tienes prohibido hablar? Piénsalo.) / La más alta forma de ignorancia es cuando rechazas algo de lo cual no tienes la menor idea.

MATT DRUDGE

¿Matt qué? Confieso que yo también me pregunté lo mismo. Shame on me, nunca lo había oído mencionar. Hoy, Matt Drudge es un periodista blogguero gringo inmensamente popular que llega a docenas de millones en todo el mundo y tiene “más influencia que el New York Times”. Aquí, el discurso que dio en 1998 en el National Press Club y dio las bases conceptuales de su fantástico éxito: http://www.americanrhetoric.com/speeches/mattdrugdenationalpressclub.htm.



Y una rara entrevista con él: https://www.youtube.com/watch?v=uctr655mogs



En fin, un indicio más de la muerte en proceso de esos engendros burocráticos conocidos como “coordinaciones de comunicación social” (antes “oficinas de prensa”), que no son otra cosa que komisarías de control y manipulación al servicio de los políticos en las infoguerras cotidianas (te lo digo yo, que he estado en varias de esas komisarías).



THE REVENANT

En México la titularon “El renacido”. Es la adaptación de 2015 al cine de una novela “sobre la venganza”, escrita por Michael Punke. La película está dirigida por Alejandro González Iñárritu y protagonizada por Leonardo di Caprio y Tom Hardy. Está nominada para 12 Óscares; a ver cómo le va.

El nombre me evoca esta cita del libro “Don Camaleón” de Curzio Malaparte, escrita para satirizar a los pueblos sumisos ante sus amos como Napoleón y Mussolini (valientemente, en pleno dominio de Mussolini: 1928): “Se inventó la moda del revenant, que consistía en un largo chal de seda con el que las señoras se envolvían las caderas y que revenait par derriere, terminando a la altura de la ingle en un ancho fleco a la holandesa.”

LULA

Sobre los escándalos de la tremenda corrupción en el gobierno brasileño desde los tiempos del bonachón Luiz Inacio Lula Da Silva, me dice un queridolector:



“Yo nunca me creí el cuento de que Lula era el nuevo Mesías impoluto. Como otros izquierdistas del corte de Echeverría, a populistas como Lula les encanta la riqueza (propia) mientras vociferan por los pobres. Las desviaciones de dinero público fueron faraónicas con este sujeto y por eso ha tenido amagos de enjuiciamiento. Su hijo se mandó construir una hacienda con castillo versallesco en plena selva. Lo que me fastidia es la demagogia e hipocresía de esta corriente.”



FRAUDES POR CLONACIÓN

“En 2015 fueron emitidas más de 200 millones de tarjetas de crédito, licencias de manejo, pasaportes y tarjetas de débito. Todos y cada uno de esos documentos contiene una falla crítica. Peor aún, los bancos y compañías de tarjetas de crédito están perfectamente enteradas de esto y no están haciendo absolutamente NADA al respecto.

¿Cuál es esta falla? El chip RFID, ese cuadrito plateado metálico en el anverso. Ese chip contiene todos tus datos financieros que pueden ser fácilmente extraídos por cualquiera que pase un escáner de $25 dólares o un celular Android cerca de tu bolsillo o maletín.

Nada más en 2014 y en EU, $16 millardos de dólares fueron hurtados por esta vía (robo de identidad).”

Este fraude sencillo se llama “clonación” y cualquiera de nosotros puede ser víctima. ¿Y así quieren terminar el dinero en efectivo y que en cambio nos “bancaricemos” todos? Mmmmm, lo veo muy ojón para paloma.

Por lo pronto yo ya reduje a una sola mi arsenal de tarjetas de crédito. Lo hago por absoluta necesidad dado que el sistema financiero electrónico todavía (y subrayo el “todavía”) funciona y es imperativo para ciertos efectos. Esa única tarjeta la uso con extremo cuidado, la saco con más prudencia que una pistola (que no tengo) y la mantengo bajo siete llaves cuanto puedo. Cierto que hay adminículos “protectores”, pero ¿qué tanto realmente protegen, por cuánto tiempo van a servir, etc? Uf, este es el cuento de nunca acabar.