Por nuevo fiscal del estado

*Por nuevo fiscal del estado

-El tal Zeferino Galindo

En unos 20 días conoceremos a los aspirantes a la titularidad de la Fiscalía General del Estado.

Este jueves el Congreso local lanzó la convocatoria a los profesionales del Derecho que aspiren a ese cargo, tras la renuncia de Xavier Olea Peláez.

De entre todos los abogados interesados, se elegirán a diez para enviarlos al Jefe del Ejecutivo del estado, Héctor Astudillo Flores.

El gobernador, a su vez, definirá de entre todos una terna que enviará al Congreso para que los diputados elijan al nuevo fiscal.

La convocatoria precisa que las solicitudes de registro de aspirantes a ocupar el cargo de fiscal general del estado se recibirán del 27 de abril al 7 de mayo de 2018, con excepción de los días 28, 29 y 30 de abril, en un horario de las 9:00 a las 15:00 horas, por la Presidencia de la Junta de Coordinación Política.

Se tendrán que entregar, por el propio interesado, al personal técnico que se designe en el Recinto oficial del Poder Legislativo del Estado, en el Boulevard Vicente Guerrero, Trébol Sur, Sentimientos de la Nación S/N, Colonia Villa Moderna, en Chilpancingo.

El nuevo fiscal general del estado estará en funciones durante un periodo de seis años improrrogables.

SIN CALIDAD MORAL.- En Acapulco, un tal Zeferino Galindo (porque el apellido Torreblanca ya se lo retiró su propio padre) se ha empeñado en enganchar al debate al alcalde perredista Evodio Velázquez.

El tal Zeferino Galindo, quien es candidato a alcalde de mi adorado municipio porteño, intenta realizar campaña atacando al Ayuntamiento.

Pero, acaso ya olvidó sus marranadas cuando, precisamente, fue alcalde de Acapulco.

Por ahora no voy a entrar en esos detalles, y sólo diré que Zeferino Galindo se olvida que Evodio Velázquez no es candidato a ningún cargo de elección popular.

Es un hecho que el alcalde de Acapulco no se enganchará en esa perversa estrategia de un ex gobernador en cuyo periodo gubernamental se desató la violencia en Guerrero.

Y ahora que aspira a ser alcalde nuevamente, me encantaría escuchar o leer su discurso a las familias porteñas en su búsqueda de votos.

No me lo imagino en ese escenario, porque primero tendría que explicar a la sociedad acapulqueña el por qué su padre lo desconoció como su hijo, al grado de advertirle que ya no llevaba su apellido: Torreblanca.

A mis paisanos acapulqueños les pregunto: ¿Votarían por un sujeto cuyo padre detesta por abusivo, por mañoso?