PRI: los dos perdedores

Con la virtual llegada de Heriberto Huicochea Vázquez a la dirigencia estatal del PRI, las maniobras de poder de los grupos políticos encabezados por el ex gobernador René Juárez Cisneros y Manuel Añorve Baños, se tornan demasiado predecibles. Porque es evidente que ambos van a dejar fuera de la pelea por el senado de la república, al grupo político del propio gobernador Héctor Astudillo Flores. Tal y como hoy le acaban de quitar el control político de la dirigencia estatal tricolor. Nada más es cuestión de acomodar las fichas en el tablero político de ese partido en crisis terminal, para entenderlo mejor.
RENÉ Y MANUEL: ENSEÑAR EL MÚSCULO.- Hay varias lecturas en relación a los recientes reacomodos políticos tricolores: 1.- El ex gobernador y actual subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación, René Juárez Cisneros, se le adelantó un paso a Manuel Añorve. Porque si bien es cierto que éste último había retenido para su grupo el CDE del PRI con José Parcero López, René aprovechó la condición de orfandad política del grupo añorvista plegado a su vez, a Manlio Fabio Beltrones Rivera, el ex dirigente nacional de ese partido. Y atacó impulsando como virtual dirigente del PRI estatal, a su ex secretario de Desarrollo Social, Heriberto Huicochea Vázquez. 2.- En ese carril, es evidente que Añorve tratará de presionar en dos flancos políticos visibles: o se mueve para acaparar él mismo la candidatura al senado de la república para la elección federal de julio de 2018. O de lo contrario, impulsa a su esposa, la actual diputada federal Julieta Fernández Márquez, hacia dicha posición. Es claro que Añorve no quiere a estas alturas, la candidatura tricolor a la alcaldía de Acapulco para su cónyuge. Sino perfilarse mediante una presión de poder a cuatro manos, hacia la disputa por el gobierno estatal en la elección de 2021. 3.- El punto sin embargo, es que René Juárez, también baraja sus propias cartas para el Senado. Y la más visible es la actual secretaria de Desarrollo Social, Alicia Zamora Villalba, quien ya ha sido diputada local, federal y alcaldesa de Chilapa. Apelando desde luego, a la famosa equidad de género. También estaría empujando al actual secretario de Finanzas del gobierno astudillista, Héctor Apreza Patrón. René ya dio señales de que es hábil en la operación política y explota coyunturalmente sus relaciones de poder, con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, pues le arrebató a Manuel Añorve, la dirigencia estatal tricolor. Y en esa lógica, no tendría ningún problema para imponerse también en esta definición, al propio mandatario estatal tricolor. 4.- En este escenario debe resaltarse una situación compleja para el actual grupo gobernante: Héctor Astudillo, carece de cuadros políticos con probada plusvalía electoral, como para enviarlos a la competencia por el Senado. Con todo, hay uno que le haría la lucha, pero igual estaría condenado a la derrota electoral aparatosa: el actual subsecretario de Finanzas y ex edil interino de la capital, Tulio Samuel Pérez Calvo. El gobernador priísta al fin entendió –si es que lo hizo con frialdad y sin apasionamientos-, la lección política: al negarse a sembrar cuadros políticos a lo largo de su carrera por el gobierno estatal, los cuales evaluaba que ’le hacían sombra’, abrió la cancha –como hoy ocurre- para que otros grupos de poder le comieran el mandado. Pero es su triste y deprimente realidad política. Y para la elección de gobernador de 2021, el candidato del PRI tendría que surgir necesariamente, del grupo de René Juárez, quien va a empujar con toda su fuerza, capital, cabildeo y contactos de poder tricolor, para que el candidato al Senado emerja de ese grupo político. Los dos perdedores son sin duda alguna, Manuel Añorve Baños. Y el propio gobernador, Héctor Astudillo.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Mucha polémica han causado los gastos onerosos de funcionarios, tanto de la comuna porteña, como del gobierno estatal, quienes viajaron con gastos pagados a la Feria Internacional de Turismo en España. Pero es el gobierno estatal sin duda alguna, el más despilfarrador en una temporada de crisis política tricolor. Porque mientras la comuna acapulqueña envió a 6 regidores y dos funcionarios, el gobierno estatal mandó a 14 funcionarios más acompañantes. Y la comuna gastó medio millón de pesos en ese periplo, contra 4 millones de pesos que le costó al gobierno estatal, la sola instalación del stand guerrerense en ese país europeo. Como se ve, el gobierno estatal gasta sin control. Ni límites.