Asume el Congreso compromisos
Ángel Irra Carceda
Este martes al seno del Congreso local, se escucharon planteamientos de legisladores conjuntar esfuerzos en aras de encontrar alternativas de solución al grave fenómeno de violencia que azota a nuestra entidad.
Se expuso la necesidad de firmar un pacto de unión entre los tres niveles de gobierno con la sociedad en su conjunto, para iniciar una cruzada en contra de esta violencia.
Y llamó la atención que fueron legisladores de oposición los que lanzaron la convocatoria, contrario a lo que hacen con insistencia otros actores políticos de oposición al actual gobierno del estado.
El diputado panista, Iván Pachuca Domínguez, planteó que en este Pacto de Unidad también se involucren incluso los medios de comunicación, organizaciones sociales, partidos políticos, instituciones educativas, empresarios y sindicatos.
El perredista Sebastián de la Rosa Peláez, propuso que en este esfuerzo conjunto tengan participación especial los tres poderes del estado (Legislativo, Judicial y Ejecutivo).
Y puso énfasis en la necesidad de luchar, TODOS, en contra de la violencia, porque ’ha crecido a niveles de verdadera emergencia, y se ha convertido en insostenible’.
La diputada Flor Añorve Ocampo no soslayó el fenómeno de la violencia, pero recalcó que a diario se observa el trabajo en todos los ámbitos y en las diversas zonas de la entidad.
Por eso mismo, subrayó, resulta por demás infundada las exigencias que algunos actores políticos plantean en franco intento para denostar al gobierno estatal.
Cierto es que la situación en Guerrero ahora, con la violencia, es grave, pero en gobiernos recientes los guerrerenses padecimos fenómenos de crisis hasta de parálisis gubernamental y saqueo de recursos públicos.
Y muchos de los que ahora llegan incluso a pedir la renuncia del gobernador Héctor Astudillo Flores, nada dijeron. Callaron sumisamente. Fueron cómplices.
No intentamos, en lo absoluto, minimizar el grave fenómeno de la violencia, y que seguramente en algunas áreas del gobierno estatal algunos funcionarios simple y sencillamente no han dado el ancho.
No se observa que TODOS vayan al galope que ha impuesto al trabajo el mandatario estatal, y creo que por eso se justifica la exigencia de algunos cambios en el gabinete.
Pero de ahí a que exista ingobernabilidad, no. Ahora existe, como no existió en el pasado reciente, movilidad gubernamental. A diario se palpa, se comprueba, el accionar del Ejecutivo.
Pero (siempre ese ’pero’), hay actores políticos que aún no digieren los reveses.
Este mismo martes, en la Ciudad de México la dirigencia nacional del PRD se lanzó a la yugular del gobernador Astudillo.
Dieron a conocer acuerdos de un plan de acción que firmaron la presidenta del CEN del PRD, Alejandra Barrales Magdaleno, y la secretaria general, Beatriz Mojica Morga.
Reiteraron su calificación de ’fallido’ al gobierno estatal, y que ha ’fallado en un derecho fundamental como lo es garantizar la seguridad humana’.
Ajá. Les preguntaríamos, por ejemplo: ¿Qué hizo Ángel Aguirre Rivero para garantizar la seguridad de los normalistas y civiles asesinados, y los desaparecidos, en Iguala, en septiembre de 2013?
¿Qué hizo para evitar el asesinato de los dos normalistas de Ayotzinapa masacrados en el bulevar de Chilpancingo el 12 de diciembre de 2011?
Y así nos podemos seguir con más ejemplos de sucesos que ciertos perredistas callaron, debido a que incluso formaban parte de aquel gobierno fallido. Ése sí. Ahí está el antecedente irrefutable.
Y precisamente parte de ese gabinete lo fue la señora Beatriz Mojica Morga, como flamante secretaria de Desarrollo Social.
Fue cercanísima del defenestrado Ángel Aguirre Rivero, desde el inicio de esa administración, y en la misma primero fue titular de la Coordinación General de Fortalecimiento Municipal.
Pesan sobre la señora muchos señalamientos. Serios todos. Y han sido públicos desde hace tiempo.
¿Quieren Algunos? Fue denunciada porque presuntamente, desde la Secretaría de Desarrollo Social, utilizó recursos públicos para impulsar su proyecto político, y que luego para ocultar esas señaladas irregularidades, se cometió el incendio de las oficinas de la dependencia, lo que relacionaron con el manejo supuestamente turbio de 8 mil 698 millones de pesos.
Cabe recordar que, además, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) determinó que existió un desvío de recursos de 22 programas federales, en el periodo en el que Mojica Morga fue titular de la Sedesol.
Hay mucho más que decir sobre este tema, pero por el momento aquí la dejamos.
Me quedo, sí, con la convocatoria a unir esfuerzos contra el grave fenómeno de la violencia. Porque busca construir, no destruir.
La madurez política y social debe imponerse. Hay que repudiar a esas voces que llaman a incendiar a nuestro estado de Guerrero. Y, por supuesto, no dejar de exigir resultados mejores a nuestros gobernantes. (angelirracar@hotmail.com)