Concatenaciones
Fernando Irala
Se ha instalado en fecha simbólica –la víspera del aniversario del inicio de la Independencia nacional— el cuerpo legislativo que tendrá como objetivo dotar a la Ciudad de México de su Constitución Política.
Sus tareas concluirán con la promulgación de la Constitución capitalina, que ocurrirá en otra fecha histórica, cuando la Carta Magna que rige el país celebre su centenario.
Como todo proceso constituyente, el actual no ha estado exento de conflictos y protestas, algunas de la cuales vienen de origen, como la relativa a la conformación de sus integrantes, pues de los cien previstos sólo sesenta surgieron de un proceso electoral, en tanto el resto fue designado por distintas instancias locales y federales. La más reciente ha sido que el cargo de Presidente de la Comisión Instaladora haya recaído en el priísta Augusto Gómez Villanueva, porque es el decano en las actividades legislativas, pero fue designado por el Presidente de la República.
En realidad, tampoco los constituyentes electos pueden presumir de gran legitimidad, pues la inmensa mayoría de los ciudadanos de la capital simplemente ignoraron la convocatoria respectiva, y el proceso registró el más alto nivel de abstencionismo en la historia.
Por otro lado, los constituyentes realmente no redactarán la Constitución, pues el proyecto inicial ya ha sido elaborado y presentado por un equipo designado por el Jefe de Gobierno, a partir del cual la asamblea trabajará y hará las modificaciones pertinentes.
En la mezcla de diputados constituyentes electos y designados, pensada para evitar el predominio aplastante de una tendencia política, de cualquier manera los partidos llamados de izquierda son los que suman una mayoría relativa.
Habida cuenta del divisionismo que siempre priva en esos grupos, y que en los recientes años les ha causado fracturas y conflictos, no necesariamente esa mayoría prevalecerá a la hora de aprobar el articulado.
Pronto sabremos si el trabajo de la Constituyente está a la altura de lo que demanda la ciudad y el país --pues a fin de cuentas ésta sigue siendo la capital de todos los mexicanos.
