El voyerista
Alfredo Guzmán
Ya he repetido que en el estado de Guerrero, el que no cae lo avientan. En el primer tema diré que me da pena ajena en lo que se han convertido las policías comunitarias, identificadas como Frente Unido para el Desarrollo y la Seguridad del estado de Guerrero (FUSDEG) comandada por Salvador Alanis y la Unión de Pueblos y Organizaciones del estado de Guerrero (UPOEG), que dirige Bruno Plácido. Ni a quien irle.
Pero los miembros del Fusdeg, identificados por su zona de arraigo, Ocotito Petaquillas se metieron en un súper conflicto, al emboscar ayer a su contraparte, la Upoeg, dejando un saldo de 6 ciudadanos muertos, porque no son policías desde mi punto de vista y otros tantos heridos.
El conflicto deriva en una lucha sin cuartel y sin control de la zona Cacahuatepec-Xaltianguis- Petaquillas, que a juicio del líder del FUSDEG, Salvador Alanís, es una ruta de trasiego de droga y los de la UPOEG, de Bruno Plácido, se las quieren quitar y eso no lo permitirán.
¿Y la seguridad que pregonaban era una pantalla? Pues claro que si. Todas las policías comunitarias del estado de Guerrero, se amparan en La Ley Número 701 de Reconocimiento a los Derechos y a la Cultura de los Pueblos y Comunidades Indígenas del Estado de Guerrero, y por los Tratados Internacionales en cuanto a derechos y leyes indígenas.
Pero la Ley número 701 contiene disposiciones que no sólo tienen como principal objetivo la conformación de grupos armados de autodefensa o policía comunitaria, sino que la Ley se convertirá en palanca de desarrollo que impulsará un desarrollo sustentable, integral y económico de las comunidades indígenas y campesinas de esta entidad federativa.
Y aclaro, ni Ocotito, ni Petaquillas, ni Colorada, ni Xaltianguis o Cacahuatepec, son zonas indígenas, podrán ser campesinas, si. Y por ende, no son policías comunitarias, sino grupos armados, pero al servicio de quien les pague sus servicios. Y eso está fuera de la ley. Esto es el tema malo.
En el segundo tema, diré que mis 33 años como universitario, me dejan satisfecho, pero sin renunciar al pasado, considero que la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), desvió un tiempo el propósito de generar conocimiento, promover ciencia, desarrollar tecnología y fomentar la cultura. Fueron las circunstancias y el rezago educativo y los excesos del poder, quienes activaron y generaron que la UAGro, se convirtiera en adalid de la lucha social en Guerrero.
Una buena universidad al final de cuentas, fomenta el cambio social. Y la Universidad Pueblo, nace de un reclamo social, que quizá hoy, no pudiera ser viable, porque las circunstancias han cambiado. Zapatero a tus zapatos, reza el refrán y la UAGro, y los universitarios entendieron el mensaje.
Y quien ha entendido, capitalizado, orientado, fomentado y promovido el cambio en la institución educativa más grande e importante del estado de Guerrero, sin duda es el actual rector Javier Saldaña Almazán. Claro, las cosas han cambiado gracias a muchos elementos y circunstancias, pero la directriz marcada desde hará unos 12 años, desde que fue Director de Planeación Educativa, hoy se manifiestan.
Habrá quien diga que la UAGro perdió su esencia y tiene su razón. Pero las universidades en el mundo, no tienen la función de hacer revoluciones ni abanderar sociedades hacia su emancipación.
Hoy prevalecen los indicadores académicos, los logros y avances y el liderazgo académico que manifiesten las instituciones. El prestigio de la UAGro, crece en su entorno. De ser una universidad ’patito’, hoy tiene centros educativos de calidad y excelencia. Centros de investigación de excelente nivel y reconocimiento nacional.
Javier Saldaña Almazán, por mandato y permiso del H. Consejo Universitario, realiza una gira por los Estados Unidos, para fortalecer lazos con instituciones como la Massachusetts Institute de Technology, hizo una visita a la Universidad de Harvard, junto con personal de la Asociación Nacional de Universidades e Institutos de Educación Superior (ANUIES), quienes promueven la internacionalización de la educación de México.
También concluyó con éxito el Seminario ’Los Retos del Rector ante la Universidad del Futuro’ en MaxwellUS. El rector de la UAGro es Vicepresidente del Consorcio de Universidades de México (CUMEX) donde convergen unas 50 universidades del país, y en donde la UAGro, inició muy rezagada. Hoy eso ha cambiado, gracias a los avances en los indicadores académicos. Un trabajo de años.
Este 28 de octubre en Chetumal, Quintana Roo habrá cambios en el Cumex y Javier Saldaña Almazán es uno de los que más se mencionan para presidir tan importante instancia organizadora de universidades.
En Noviembre, posiblemente el actual rector habrá de tener que renunciar a la rectoría de la UAGro, porque se avecina una posible relección. Eso no es un invento, eso se construye todos los días. El liderazgo del actual rector, se nota, se distingue.
Lo cierto, es que la UAGro, hoy se nota. Y se anota bien.
