’ Proclamamos entre vosotros el Evangelio de Dios ’


Sinceridad y sabiduría del auténtico discípulo

| | Desde guerrerohabla.com

’ Proclamamos entre vosotros el Evangelio de Dios ’
Religión
Agosto 24, 2021 18:30 hrs.
Religión ›
Agencia de noticias Plata Pura › guerrerohabla.com

La Palabra de Dios

Miércoles 25 agosto, 2021

Lectura I
1 Tes 2, 9-13
Hermanos: Sin duda se acuerdan de nuestros esfuerzos y fatigas, pues, trabajando de día y de noche, a fin de no ser una carga para nadie, les hemos predicado el Evangelio de Dios.

Ustedes son testigos y Dios también lo es, de la forma tan santa, justa e irreprochable como nos hemos portado con ustedes, los creyentes. Como bien lo saben, a cada uno de ustedes lo hemos exhortado con palabras suaves y enérgicas, como lo hace un padre con sus hijos, a vivir de una manera digna de Dios, que los ha llamado a su Reino y a su gloria.

Ahora damos gracias a Dios continuamente, porque al recibir ustedes la palabra que les hemos predicado, la aceptaron, no como palabra humana, sino como lo que realmente es: palabra de Dios, que sigue actuando en ustedes, los creyentes.
Palabra de Dios
Te alabamos, Señor

Salmo Responsorial
Del Salmo 138
R. (1a) Condúcenos, Señor, por tu camino.
¿A dónde iré yo lejos de ti, Señor?
¿Dónde escaparé de tu mirada?
Si subo hasta el cielo, allí estás tú;
si bajo al abismo, allí te encuentras.
R. Condúcenos, Señor, por tu camino.
Si voy en alas de la aurora
o me alejo hasta el extremo del mar,
también allí tu mano me conduce
y tu diestra me sostiene.
R. Condúcenos, Señor, por tu camino.
Si digo: ’Que me cubran las tinieblas,
que la luz se convierta en noche para mí’,
las tinieblas no son oscuras para ti
y la noche es tan clara como el día.
R. Condúcenos, Señor, por tu camino.

Aclamación antes del Evangelio
1 Jn 2, 5
R. Aleluya, aleluya.
En aquel que cumple la palabra de Cristo
el amor de Dios ha llegado a su plenitud.
R. Aleluya.


Evangelio
Mt 23, 27-32
En aquel tiempo, Jesús dijo a los escribas y fariseos: ’¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, porque son semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera parecen hermosos, pero por dentro están llenos de huesos y podredumbre! Así también ustedes: por fuera parecen justos, pero por dentro están llenos de hipocresía y de maldad.

¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, porque les construyen sepulcros a los profetas y adornan las tumbas de los justos, y dicen: ‘Si hubiéramos vivido en tiempo de nuestros padres, nosotros no habríamos sido cómplices de ellos en el asesinato de los profetas’! Con esto ustedes están reconociendo que son hijos de los asesinos de los profetas. ¡Terminen, pues, de hacer lo que sus padres comenzaron!’

Palabra del Señor
Gloria a ti, Señor Jesús

Reflexión del Evangelio de hoy

Entrega y satisfacción pastoral del verdadero apóstol
En su carta a los fieles de Tesalónica Pablo les habla de sus desvelos en el anuncio del Evangelio. También de su opción por vivir de su trabajo, probablemente en la confección de tiendas de campaña, como ya hiciera en Tarso. El Apóstol tiene a gala el no ser gravoso a nadie, aunque reconoce que le asiste el derecho a vivir de su tarea apostólica, al que renuncia de buena gana.

Reconoce asimismo que sus destinatarios han acogido la Palabra que les ha anunciado y se congratula por ello. Sus esfuerzos han dado resultado, y no hay mayor satisfacción para un misionero que contemplar el fruto de su trabajo evangelizador. La comunidad es fruto de la Palabra proclamada y acogida como lo que es, Palabra de Dios.

Pablo manifiesta también que se ha comportado como un verdadero padre con sus hijos. Es esta una actitud que ha ejercido generosamente y no piensa que esta sincera confesión de su celo pastoral pueda acarrearle ninguna disminución de su autoridad. Ya en otras ocasiones ha abierto su corazón a los que considera sus hijos en el ámbito de la fe. Con ello da a entender que la tarea apostólica se parece mucho a la solicitud de una madre que se preocupa de su prole.

La lección que se desprende de estas actitudes es muy elocuente: cuidado paternal, o maternal, con aquellos a los que queremos engendrar para la vida de fe; gozo íntimo y reconocido al constatar que el anuncio del Evangelio ha prendido en la comunidad evangelizada, transformando su vida; renuncia al legítimo sustento que se podría esperar de esa comunidad, para que se vea que el interés primordial del apóstol no es material, sino únicamente espiritual.

Sinceridad y sabiduría del auténtico discípulo
Como en tantas otras ocasiones, Jesús se enfrenta de nuevo con los maestros de la ley y los fariseos. Son los guardianes de la tradición de Israel y el pueblo respeta sus interpretaciones y decisiones acerca de la ley. Es posible que, aquí, el evangelista Mateo quiera poner en guardia a sus destinatarios contra las prácticas e interpretaciones de la ley propias de los fariseos. Son costumbres que todavía perviven en los nuevos creyentes procedentes del judaísmo y que es necesario abandonar ante la novedad de Jesús.

En este caso, Jesús reprueba las prácticas puramente externas que no van acompañadas de un sentimiento interior, sino que muestran más bien una actitud hipócrita. Cuántas veces puede suceder esto, también hoy: se conservan formas tradicionales de religiosidad, pero sin que correspondan a una vivencia profunda de la fe que parecen expresar. Jesús denuncia reiteradamente la hipocresía a lo largo de su predicación. Y reprocha también a este grupo otra cosa: que tienen hacia la ley –hacia el profundo sentido que Dios le dio a la ley- la misma actitud que hacia los enviados de Dios: una actitud de incomprensión y de rechazo.

Otro aspecto que Jesús les echa en cara es que se confiesan hijos de los que mataron a los profetas en otro tiempo. Y, en lugar de alejarse de aquella actitud de sus padres, en realidad no han cambiado. También hoy siguen manteniendo esa hostilidad frente a los que Dios les envía; concretamente, hacia él, que viene de parte de Dios. Es como si, en el fondo, reconocieran que han heredado el carácter refractario que sus antepasados vivieron respecto de la voluntad de Dios.

Nosotros hemos heredado también costumbres religiosas de los que nos precedieron: ¿corresponden a los nuevos compromisos que la fe nos exige hoy en el mundo en que vivimos, o se han convertido en rutinas anacrónicas y estériles?

Fray Emilio García Álvarez O.P.
Convento de Santo Tomás de Aquino (Sevilla)

Ver nota completa...

Escríbe al autor

Escribe un comentario directo al autor

Suscríbete

Recibe en tu correo la información más relevante una vez al mes y las noticias más impactantes al momento.

Recibe solo las noticias más impactantes en el momento preciso.


’ Proclamamos entre vosotros el Evangelio de Dios ’

Éste sitio web usa cookies con fines publicitarios, si permanece aquí acepta su uso. Puede leer más sobre el uso de cookies en nuestra política de uso de cookies.