Averígüelo Vargas

Reclama Congreso del Estado información detallada del enorme déficit del gobierno. --Pide Rogelio Ortega 600 millones “para poder terminar mi gobierno”.

El Congreso del Estado desconoce totalmente la situación relativa al déficit de 13 mil millones de pesos de los que habla el gobernador Rogelio Ortega, dijo el presidente de la Comisión de Gobierno legislativa, Bernardo Ortega Jiménez, quien demandó al mandatario estatal que informé al Poder Legislativo de la situación financiera estatal “para buscar una forma de resarcir el déficit que hay por esa enorme cantidad”.
El legislador comentó que conoció la versión del gobernador por las publicaciones que surgieron de la comparecencia del mandatario ante el Congreso de la Unión, por lo publicado en los medios de información, porque hasta ahora nada se ha informado al legislativo de esa situación, a pesar de que habló que el estado estaba por entrar “a una crisis financiera muy profunda”.
Esta delicada situación la confirmó más adelante el secretario de Finanzas, Eliseo Moya Morales, quien precisó que el faltante en las finanzas estatales suma la cantidad de 13 mil 50 millones de pesos, de los cuales, la mayor cifra le corresponde a la Secretaría de Educación, seguida por la de Salud, la de Finanzas y los organismos paraestatales.
Reconoció el representante del Poder Legislativo que si la situación es como la señalaron los funcionarios del Poder Ejecutivo “estamos hablando de una situación muy complicada”.
Demando Bernardo Ortega que el gobierno explique a quién y porqué razones se debe ese dinero o si se tomó para aplicarlo en otros rubros, “nos tienen que decir en cuáles (se hizo el gasto), toda la información deben de entregarla y desde cuántas administraciones se viene arrastrando el déficit”.
En realidad este no es un problema nuevo, ya que se viene arrastrando desde el 2001, pues en esas fechas el entonces secretario de Educación, Daniel Pano Cruz, destapó esa Caja de Pandora, cuando advirtió que el sector educativo enfrentaba su peor crisis ya que por las miles de plazas que se crearon sin autorización de las Secretaría de Educación y de Hacienda del gobierno federal, se estaban pagando con recursos estatales que no existía, de modo que el déficit se fue acumulando. En aquella ocasión el faltante era de unos 2 mil millones de pesos, que no han dejado de crecer.
Es decir, no es un problema nuevo ni ha estado oculto y se trata de una situación que los gobernantes deben conocer desde que llegan al mando y por eso llama atención que el gobernador Ortega actuara como si ignorara la existencia de ese déficit.
Debe advertirse también que de hecho no hay un solo gobierno en el país y en el mundo que no opere con un déficit financiero de mayor o menor cuantía, pero eso no les impide seguir funcionando ni tienen que declararse en quiebra, como aquí se comentó, sino que se van buscando las formas para obtener recursos extra o para mover el dinero de un lado para otro y así por el estilo.
POR ESO, ASTUDILLO, el gobernador electo no se alarmó, y señaló que conocía el problema, que se viene arrastrando desde hace unos 15 años, pero que es una situación que se puede controlar y avanzar en su solución, pero que no representa la paralización del gobierno, además de que los gobiernos no pueden declararse en quiebra.
PIDE ROGELIO ORTEGA 600 MILLONES “PARA PODER TERMINAR MI GOBIERNO”.--Sólo 600 millones de pesos pide el gobernador Rogelio Ortega al presidente Enrique Peña Nieto y al secretario de Hacienda, Luis Videgaray, porque es la cantidad que el gobierno estatal erogó para el pago de las 19 mil plazas de maestro, durante los tres primeros meses de este año y afirmó que con eso se resuelve la situación financiera de los meses que restan por concluir su administración.
Recalcó que le han solicitado al propio presidente de la República, “que nos ayuden en este último tramo que corresponde a mi gobierno, porque señala que si él logra salir bien, el nuevo gobernador, Héctor Astudillo Flores, entrará bien; a mí me faltan tres meses y a Héctor le quedarían dos para cerrar el ejercicio fiscal”.
Obviamente, el gobernador sustituto hace un planteamiento muy corto, porque sólo piensa en los meses que le quedan en el gobierno y los que le quedarían a Astudillo, pero está claro que eso no resuelve de ninguna manera el planteamiento central que hizo antes, de que Guerrero enfrenta una grave crisis financiera.
También señaló que si hizo el planteamiento de que se adelante el cambio de gobierno es porque él no está obsesionado por el poder, aunque asegura que “hay quienes matan por gobernar un día o un tramito”.
Explicó que a él lo llamaron en un momento de crisis para construir armonía, para que se realizara el proceso electoral y “sacamos la tarea, hasta con la evaluación de los maestros”.
Pero insistió que en este tramo final las cosas se pueden descomponer si no nos liberan los recursos, porque entonces habrá una crisis financiera”.
Y advirtió que no está solicitando nada que no sea justo, legítimo y legal, sino que les regresen lo que gastaron para pagarles a los maestros durante enero, febrero y marzo y ese fue un cuerdo, afirmó, con el secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
Señala que no tiene caso que se mantenga en la gubernatura estos tres meses si no tiene dinero para hace nada y que por eso planteó que se adelante la sucesión y que entre al gobernador electo a hacerse cargo del gobierno.
Sin embargo, ni el cambio soluciona nada, porque el año fiscal cierra hasta diciembre y los nuevos recursos llegarán hasta enero, además de que debe dejar recursos para el pago de los aguinaldos de los 10 meses del año que le corresponden.
¿Será que ni para los aguinaldos hay dinero?


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