Epístolas Surianas
De Julio Ayala Carlos
HAY QUE DECIRLO. DE POR SÍ SON POCOS los empleos que se generan en Guerrero, y más si son bien remunerados, en razón de que en Guerrero la mayoría de los que existen se encuentran en la burocracia, y los que se generan en la prestación de servicios turísticos. Por eso, indudablemente que preocupa el que estén en riesgo cientos de empleos directos, y miles indirectos, ante el posible cierre de la minera Media Luna.
En Guerrero, hay que decirlo, no es tan fácil generar empleos, de ahí que preocupa que por un conflicto intersindical, es decir, entre los dirigentes de dos sindicatos, que dicho sea de paso nunca le han ayudado a los trabajadores guerrerenses, esos cientos de empleos directos y otros miles indirectos estén en riesgo, y en consecuencia, el bienestar de las familias de los pueblos cercanos.
Y es que gracias a esos empleos, muy bien remunerados por cierto, no solo viven los trabajadores que de manera directa trabajan en la mina, sino también miles de familias que de manera indirecta se benefician de su operación, de tal forma que hoy tienen vida, es decir, crecimiento y desarrollo.
Hay que decirlo. De ser pueblos fantasmas los que se encuentran junto a la mina, hoy son pueblos en desarrollo. La extracción de metales preciosos, si bien benefician en gran manera a las empresas mineras, también generan desarrollo y bienestar social a los pueblos y a sus habitantes. Antes, ciertamente, ni siquiera tenían servicios, y hoy, hay que decirlo, las familias cuentan incluso con ciertos lujos.
Sin embargo, esa prosperidad y desarrollo que se palpa en los pueblos circunvecinos a la Media Luna, puede acabarse de la noche a la mañana si finalmente la empresa dueña de la mina decirse cerrar sus puertas y en consecuencia sus operaciones. Y los empleos, es obvio, habrán de perderse, y por lógica, los ingresos que perciben los trabajadores hoy en pleito, o mejor dicho, sus dirigentes.
Ése es el riesgo. Más allá de quien representa a los trabajadores sindicalizados, lo que está en juego es la pérdida de empleos por el cierre de la mina. Y creer que otra empresa puede venir a reabrir la mina no es más que un sueño guajiro, toda vez que los inversionistas van donde se les garantiza seguridad jurídica, pública y laboral.
En fin, aunque son casos diferentes, los trabajadores de la Media Luna deberían verse en el espejo de los mineros de Taxco.
EN OTRO ASUNTO, PESE AL NIVEL DE VIOLENCIA que afecta al municipio de Chilapa, su presidente Jesús Parra cierra el año con más de 150 obras, lo que habla que cuando un gobernante está decidido a cumplir con su responsabilidad, lo hace sin importar la situación en la que se encuentra el municipio que gobierna.
Chilapa es uno de los municipios en donde la violencia se ha hecho presente con mayor intensidad. Sin embargo, eso no ha sido motivo para que el presidente municipal haya dejado de trabajar por sus representados, de tal forma que lo mismo hay obra pública en la cabecera municipal que en las comunidades, incluso en las más alejadas, lo que implica que el edil está cumpliendo.
Algo que llama la atención, es que la población de Chilapa pocas veces ha sido tocada por la delincuencia, pues la mayoría de los implicados en los hechos de violencia son originarios de otros municipios, principalmente de Zitlala y Ahuacuotzingo, de tal forma que si bien hay temor en la población, los chilapenses hacen su vida diaria sin mayor problema.
Eso, hay que decirlo, está a la vista. La pasada Feria en la cabecera municipal fue un ejemplo de ello, al concluir con un saldo blanco, es decir, que la población de Chilapa pudo disfrutar de su festividad en paz y tranquilidad.
En fin que Chilapa concluye el año con mucha obra pública. Lo que señala, repito, que el alcalde no ha parado en trabajar, pese a la violencia que allí existe, aunque, hay que decirlo, la inseguridad afecta a todo el país por igual.
POR ÚLTIMO, TRAS 12 AÑOS FINALMENTE Acapulco vuelve a tener vuelo internacional, procedente de Los Ángeles, California, Estados Unidos. Sin duda, un gran logro del gobernador Héctor Astudillo, quien logró concertar el vuelo con la aerolínea Volaris, con lo cual se abre una mayor conectividad entre este polo turístico y una de las ciudades más importantes de Estados Unidos.
Y es que si Guerrero vive del turismo, es lógico que si le va bien a Acapulco, así como a Ixtapa-Zihuatanejo, y Taxco, le va bien al estado, y por ende, a los guerrerenses. Ahora toca que los prestadores de servicios entiendan que hay que tratar como se merece a los turistas, primero con una buena atención, y segundo, respetándolos.
Y es que causa pena que mientras las autoridades hacen el mayor esfuerzo posible para atraer al turismo, sea internacional, nacional o local, los prestadores de servicio, incluyendo a trabajadores del volante, hacen hasta lo imposible porque los visitantes se lleven una mala imagen del puerto y su gente.
Ojalá y lo entiendan que el buen servicio es fundamental. Ojalá y los de Acapulco visitarán Taxco, donde todos allí tratan al turismo como se merece. No por nada la ciudad platera siempre tiene visitantes.
En fin. Bien por el gobernador Astudillo Flores. Bien por Acapulco, y bien por Guerrero.
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