EL BUZÓN

El gobierno del DF, encabezado por Miguel Ángel Mancera, va de mal en peor. No sólo ha fracasado en materia de seguridad pública, sino que ahora gusta de violar la autonomía de la UNAM y balear a estudiantes.
Un policía de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, acompañado de funcionarios de esa instancia que mal dirige, Rodolfo Ríos Garza, ingresó a esa casa de estudios y disparó contra un grupo de universitarios, con saldo de dos heridos, uno de ellos de bala.
El motivo de su infundada incursión, dijeron que fue en atención a una denuncia de robo de un teléfono celular.
Torpe declaración que a nadie convence. No conforme con violar la autonomía de la UNAM, dicho policía accionó su arman, presuntamente al aire, y lesionó a dos estudiantes, lo cual provocó la ira de la comunidad universitaria y con justa razón.
Ante su grave error, el gobierno de Mancera, a través del secretario de Gobierno, Héctor Serrano, ofreció disculpas, y dio a conocer que el policía que disparó y quien responde al nombre de Luis Javier Aguinaga Saavedra, será enviado al Reclusorio Preventivo Varonil Norte.
Qué fácil, como siempre, se castiga al más débil. Acaso el Procurador Rodolfo Ríos Garza, no está al tanto de lo que acontece en la dependencia que mal dirige. No es él quien toma las decisiones importantes.
Si alguien es responsable es precisamente el Procurador, los demás ejecutan o cumplen órdenes. Ya son muchos los desaciertos en esa dependencia, como en el propio gobierno del DF. Esta visto Miguel Ángel Mancera, no está a la altura de las exigencias de la capital y de sus habitantes.
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El alcalde de Ecatepec, Pablo Bedolla, es un lastre para la población de esa localidad y para el gobierno estatal que preside Eruviel Ávila. Las voces que exigen la renuncia del edil se escuchan todos los días.
Bajo el mando de Pablo Bedolla, actualmente Ecatepec es el número uno en índice de delitos como secuestro, feminicidios, robo, violaciones sexuales y extorsiones.
Pese a ello el gobierno estatal insiste en protegerlo y mantenerlo en el cargo. El costo para la población es sumamente alto, pues los delitos van a la alza y los lastiman, pero eso no le importa al gobernador Eruviel Ávila, no escucha a los habitantes del municipio que gobernó dos veces.
Pablo Bedolla es el rostro de la impunidad y del mal ejercicio de la administración pública, no obstante, sus lazos políticos lo mantienen en la alcaldía. Así es como gobierna el PRI.
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Las constantes quejas contra el comisario de Seguridad Pública de Huixquilucan, Eduardo González, por parte de los policías que dirige, subieron de tono el viernes pasado.
Cansados por el maltrato que reciben, de su ineptitud, así como de tenerlos a renta y obligarlos a pagar sus propios uniformes, finalmente se manifestaron públicamente.
Los más de 100 uniformados exigieron la destitución del comisario Eduardo González, obviamente eso no sucedió porque el alcalde José Neyra la protege. Esta vez fueron los policías quienes mostraron su inconformidad, la próxima protesta pública será la de la población, la cual muestra hartazgo por la rapaz y equivocada forma de gobernar de políticos ajenos al municipio y ligados al grupo Atlacomulco.

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