TEXCOCO, MÉX.-Con aplausos, porras, globos flores y música los familiares de Valeria, amigos y sus compañeros de la escuela le dieron el adiós en el Panteón Jardines de Oriente.
A las 16:02, cuando el sol caía a plomo, el féretro empezó a bajar en lo que sería su última morada, su mamá, su papá y hermanos inconsolables se resistían a creer que Valeria de apenas once años, víctima de la delincuencia le arrebatará la vida tendría que partir.
Un chófer secuestrador, violador y homicida de la Ruta 40 del Estado de México, José Octavio Sánchez Razo aprovechó la inocencia para arrebatarle la vida para después abandonar la combi de la muerte en la calle Sandunga en cuyo interior fue hallado el cuerpo de la menor para para después emprender la huida Amor Eterno, Gema, Te Vas Ángel Mío y Hermoso Cariño se dejaron escuchar entre los acordeones del grupo norteño que se dejó acompañar por los que acompañaron a Valeria.
