Galimatías panista

Para el PAN la interpretación de la realidad siempre ha sido tangencial. Nunca ha profundizado n los problemas del país y su participación en la transformación de México ha sido más importante como oposición que n el poder.
Así, podemos recordar que el PAN siempre ha ido a la zaga de un gobierno conservador como el PRI, corrigiéndole la plana o simplemente convertido en su fe de erratas.
Cuando surgen los libros de texto gratuito, cientos de amas de casa simpatizantes de ese partido recorrieron las calles de las principales ciudades del norte de la República y de la capital del país, recabando cifras para que esos libros no se distribuyeran en las escuelas a los alumnos de primaria.
Ahora, uno de los cuadros que pueden aspirar a la candidatura a la Presidencia de la República, Roberto Gil Zuarth, presidente del Senado, señaló que a la maldad habrá que quitarle lo malo sin imponerle lo bueno.
O mejor aún, que para desactivar las protestas de la CNTE el gobierno federal construya una estrategia de intervención integral donde el objetivo fundamental sea la desmovilización efectiva de este conflicto pero que no pase por la abrogación de la reforma educativa.
Es decir que si se protesta por la existencia de la reforma educativa, pueda el gobierno federal impedir o mejor aún, que se convenza a los disidentes y víctimas de esta decisión unilateral, de que por lo que protestan no deben protestar sino aplaudir.
Desde su amañada ingenuidad aseguró que la posibilidad de encontrar soluciones no sólo debe dar satisfacción a quienes han emprendido el camino de la calle y la exigencia social, sino también a quienes exigen una resolución pronta e inmediata a una circunstancia y un conflicto que ya se prolongó por varios meses con importantes pérdidas económicas para varios sectores.
Es decir, aquí la evocación a Cantinflas, es otra de las características del PAN en los últimos tiempos.
"El Estado mexicano debe tener claramente una estrategia de desmovilización y desactivación de este conflicto político y esa estrategia no puede basarse simplemente en la abrogación de la reforma educativa, eso no debe estar en discusión y tampoco debe estar en la órbita de opciones y soluciones que tenga el gobierno de la República sobre el escritorio", estableció con aparente conocimiento del tema y de la estrategia política.
El panista consideró que más allá del uso o no de la fuerza pública, está posibilidad debe ser un medio para conseguir el objetivo de desmovilizar de manera efectiva este conflicto magisterial.
Desactivar un conflicto social es una frase emanada del más puro fascismo. Cómo desactivar la inconformidad que surge de una ilegalidad, que no por ser protagonizada por el gobierno deja de ser un delito.
Gil Zuarth, todavía no acaba de explicar satisfactoriamente la acusación de tráfico de influencias del que fue acusado cuando era funcionario en el gobierno de Felipe Calderón. Este galimatías que intenta explicar la postura de su partido respecto a un conflicto en el que políticamente le convenía al PAN no intervenir, ahora le hace compañía a su líder nacional, Ricardo Anaya, tomando posiciones que no definen la postura de un partido sino el rancio conservadurismo de una herencia fascista como formación individual, social y partidista.