Dos años después de haberse iniciado la pandemia más mortífera en casi 100 años y tras un esquema de vacunación masivo que adelantó a naciones primermundistas, México al fin abandonó las primeras 30 posiciones por defunciones asociadas a COVID en el mundo, reveló Google en su apartado de Estadísticas, mismo que cruza datos de las fuentes oficiales más confiables disponibles en el orbe.
Desde el año pasado México ya había cubierto a la población objetivo de la vacuna contra COVID con un esquema completo, a la par que se han venido aplicando ’refuerzos’ -tercera dosis-. El esquema estaría a un par de meses de atender a la población mayor de 15 años, planificándose la idoneidad de la población infantil, que por sí misma genera hasta 39 veces más anticuerpos contra la enfermedad que un adulto pero que también es vacunada alrededor del mundo. También ha ayudado que la población ’antivacunas’ en México es muy inferior a la de otras naciones, incluso a aquellas que se denominan desarrolladas.
En la actualidad, desde el inicio de la pandemia, México acumula una tasa de 2 mil 498 defunciones por cada millón de habitantes, lo cual lo ubica en la posición 91 mundial y en la 9 para naciones americanas.
México nunca ha estado en los primeros diez lugares a nivel mundial si bien existieron medios que desinformaron de manera dolosa al realizar un ranking con cifras absolutas y no con tasas, pese a que los territorios no gozan de poblaciones similares.
Será en los años siguientes, ya una vez superada la pandemia por COVID, que se conozca la cifra real de defunciones en el mundo, misma que actualmente es de 2.8 millones de personas pero que según Naciones Unidas rebasaría los 6 millones, estimando estas mediante el modelo de exceso de mortalidad, que es la diferencia entre las defunciones esperadas según una regresión lineal y aquellas que efectivamente se registraron en actas, amabas asociadas a problemas respiratorios.
En el caso de México hasta un 42% del total de defunciones no se habría registrado, provocando diversas modificaciones en las cifras que se presentan de manera diaria, mientras en el mundo el porcentaje de defunciones no registrado sería mayor al 50%, sin que la mayoría de los países haya realizado ajuste alguno a diferencia del país.