Epístolas Surianas
De Julio Ayala Carlos
DECIR QUE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ Obrador es el mejor presidente de México, es decir, mejor que Benito Juárez, del periodo de la Reforma, o mejor que Lázaro Cárdenas, que nacionalizó el petróleo, ciertamente es un despropósito, un disparate, o en el mejor de los casos, un acto de queda bien con el mandatario federal, aunque hay que decir que a éste no solo le gusta que se lo digan, sino que hasta se compara con ellos, así como con el Padre de la Patria, don Miguel Hidalgo, o con el Apóstol de la Democracia, don Francisco I. Madero.
Por supuesto, cada quién puede decir lo que quiera, al fin que hasta ahora, todavía, en México se goza de libertad de expresión, pero decir que López Obrador es el mejor presidente que ha tenido el país, no sólo es una muestra de queda bien y lambisconería, sino de ofensa a los mexicanos, y por supuesto a los guerrerenses, como si éstos no supieran quién es el hoy mandatario federal.
Cierto. Se entiende que los del estado de Tabasco digan que Andrés Manuel es el mejor presidente del país, porque es oriundo de esa entidad y porque además, como mandatario federal les condonó miles de millones de pesos por el servicio de energía eléctrica, y porque les está construyendo una refinería; se entiende también que los de Yucatán lo digan también porque les construye un ferrocarril, y se entiende también que los militares digan lo mismo porque les está dando todo el dinero que quieren, incluido el aeropuerto Felipe Ángeles, pero…
Pero no se entiende de las autoridades del gobierno del estado, aunque sean del mismo partido político, después de dejar el PRD, pues siendo responsables y honestos no entiendo de dónde sacan tal calificativo, como tampoco el dicho de que el estado de Guerrero sigue caminando por la senda del progreso, ’guiado por el innegable y voluntario apoyo del mejor presidente de México’, Andrés Manuel López Obrador.
¿Alguien puede decir, sin faltar a la mentira, cuál es el innegable y voluntario apoyo del presidente López Obrador para con Guerrero? Cierto, en su reciente ’gira de trabajo’ por Guerrero anunció la inversión de 2 mil 100 millones de pesos para los 21 municipios de la Montaña, pero sólo es un compromiso, porque hay que señalar que así como dice una cosa dice otra, de tal forma que mientras no se concreten esos recursos, la cosa está en veremos.
Hay que decirlo de nuevo. En los tres años que lleva ya el gobierno federal, Guerrero no ha recibido ningún apoyo significativo que marque la diferencia con otros presidentes de la República, con todo y que una y otra vez diga que está comprometido con el estado porque en las tres elecciones presidenciales se ha volcado en su apoyo, de tal forma que ese dicho de que amor con amor se paga no es más que un cuento chino, porque hasta ahora el gobierno que encabeza ha sido mezquino con Guerrero.
Esto sí, no es cuento. Y es que a su llegada como presidente de la República, a Guerrero, junto con Michoacán, le fue cancelado el proyecto de la Zona Económica Especial, ubicada entre los límites de los dos estados, el cual vendría a detonar el desarrollo económico de la región; el argumento: actos de corrupción, aunque como siempre, nunca demostró su dicho, y por si fuera poco, en el último año del gobierno estatal anterior, le recortó al estado nada más, pero nada menos que mil 400 millones de pesos, por solo citar dos ejemplos de que en el caso de Guerrero, eso de que amor con amor se paga no es cierto.
Es pues un despropósito decir que Guerrero avanza por la senda del progreso, a través de la llamada Cuarta Transformación, y con el apoyo ’innegable y voluntario’ del presidente López Obrador. Los datos, y las cifras allí están, para consulta de todos.
Se entiende, por supuesto, el querer quedar bien con quien hoy gobierna el país, y más si se es del mismo partido, pero…. ¿dónde está ese apoyo que no se ve?
Claro. Hay que reconocer al presidente de la República que la entrega de dinero a los grupos vulnerables se ha incrementado como en ningún otro gobierno que haya tenido el país. Eso es cierto, e innegable, aunque el hecho tenga por objeto asegurar el voto en favor de los candidatos del partido del presidente. Sin embargo, la entrega de estos recursos no sólo se lleva a cabo en Guerrero, sino también en otros estados del país.
En fin. Decíamos que cada quien puede decir lo que quiera, pero cuando se habla a nombre del estado, y más cuando se trata de endiosar a quien nada ha hecho por él, ahí hay que empezar a disentir.
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