El pasado 15 de diciembre inició de manera formal el proceso electoral para renovar al poder ejecutivo del estado de Hidalgo, marcado por una diferencia de entre 20 y 30 puntos de ventaja entre los aliados morenistas sobre los aliados del PRI, quien actualmente se encuentra en el poder.
A poco más de 6 meses de celebrarse los comicios, la barrera luce infranqueable.
Para El Heraldo Media Group, la preferencia efectiva de Morena es del 48.5%, más del doble que el segundo lugar que le corresponde al PRI con 22.5%. Sumadas las preferencias efectivas de cada ’aliado’ que participará vía coalición, Morena alcanza hasta el 65.8% de la intención de voto.
Aquí, la brecha en preferencias es de más de 30 puntos.
Para la encuestadora Massive Caller, las preferencias efectivas por Morena alcanzan el 56.7% seguidas por el PRI con 31.1%, habiendo una distancia de 25.6 puntos entre ambos.
En el caso de Demoscopia Digital, en términos efectivos la alianza morenista tiene 56.4% de preferencias por 38.2% del PRI, PAN y PRD en su conjunto, siendo un 18.2% de ventaja.
