El Tren Maya, la obra de infraestructura más importante que se tiene proyectada realizar en esta administración, ha despertado e interés de diversas empresas, entre ellas la Portuguesa Mota-Engil.
Por eso, esta obra ya sumó a su lista de posibles interesados a la portuguesa Mota-Engil, la cual quiere participar en la construcción del ferrocarril turístico del sur-sureste del país, que ha sido definido como el proyecto de infraestructura insignia del nuevo gobierno en México.
’Sin duda alguna, tenemos pleno interés (en el Tren Maya). Como constructora, Mota-Engil México, en cuanto se conozcan las bases de la licitación para la construcción del proyecto, no tengo la menor duda de que vamos a estar levantando la mano para que nos inviten’, aseguró Roberto Lang, director general de Mota-Engil Turismo en el país.
Cabe destacar que el Proyecto de Presupuesto Egresos Federales (PPEF) 2019 presentado por Carlos Urzúa, titular de la Secretaría de Hacienda, contempla 6 mil millones de pesos de inversión para la construcción del Tren Maya.
El tren, que plantea conectar a cinco entidades del sur del país, está dentro de los 18 proyectos prioritarios de la administración federal que recibirán partidas para su puesta en marcha a partir del próximo año.
De acuerdo con Lang, el ferrocarril de mil 525 kilómetros en el sureste del país ayudará a incentivar el desarrollo económico y social de una de las zonas con mayor pobreza de México.
’El Tren Maya es un extraordinario proyecto, sé que es un proyecto controversial, hay quienes se pronuncian en un sentido u otro, sin embargo, es un proyecto importante que va a venir a cambiarle la cara, la dinámica social y de la generación de empleos de una de las zonas del país que más lo necesita’, estimó el CEO de Mota-Engil Turismo.
Se prevé que la obra ferroviaria cueste en total entre 120 mil y 150 mil millones de pesos, por lo que el monto destinado en el Paquete Económico 2019 cubrirá solo el 5 por ciento de la inversión prevista. Asimismo, se espera que el presupuesto total sea aportado a través de un sistema de inversión mixto entre la Iniciativa Privada y el Gobierno Federal.
Además de la construcción del ferrocarril, la firma portuguesa analiza algunos polos turísticos para desarrollar en la zona por donde se tiene previsto pase el Tren Maya.
