R A F A G A

La sucesión presidencial, no se detiene

La sucesión presidencial, no se detiene
Política
Enero 12, 2016 14:29 hrs.
Política ›
Jorge Herrera Valenzuela › diarioalmomento.com

Mire usted lo que son las cosas, los pros y los contras provocados por la segunda recaptura de Joaquín Guzmán Loera junto con el pleito personal del gobernador de Morelos con el alcalde de Cuernavaca, en nada alteran las inquietudes de quienes quieren disputar, dentro de dos años, la Presidencia de la República, ahora que tiempos y formas han cambiado como consecuencia de que no hay políticos de carrera, sino presurosos aspirantes.
La sucesión presidencial fue en el siglo pasado, hasta 1994, un suceso que guardaba solemnidad y se registraba en el tiempo adecuado, se decía: “ni antes, ni después”. En ese año se acabó la era de “el dedazo”; terminaron los días en que el presidente saliente, designaba al que recibiría el honor de ocupar la Presidencia de México. Bueno, todo comenzó en 1940 cuando el general Lázaro Cárdenas del Río apuntó hacia su colega Manuel Ávila Camacho y terminó con el asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta, cuando el que menos era conocido, resultó nominado para cerrar los procesos electorales del siglo XX.
En este dos mil dieciséis, cuarto año del sexenio que comenzó con muchos bríos y espectacular firma de un Pacto por México, los que tienen aspiraciones para recibir el apoyo de alguno de los diez partidos políticos, que cobran mensualmente millones de pesos, en el Instituto Nacional Electoral, no sufren ni se acongojan porque el dólar nos cueste más de 18 pesos y menos aún les preocupa que el precio del barril de petróleo ande apenas en 23 dólares. Total, todo está bajo control, según Luis Videgaray, multicondecorado secretario de Hacienda y Crédito Público.
Tampoco se inmutan los que por cuenta propia están en la búsqueda de su oportunidad, como candidatos independientes. De los tres triunfadores el año pasado, solamente el diputado local, el jalisciense Pedro Kumamoto, puede ser calificado como tal porque ganó por el empuje de sus compañeros de estudio y sin tener antecedentes partidistas. Los otros dos, son el gobernador neoleonés Jaime Heliodoro Rodríguez Calderón, priista con 33 años de militancia y el expanista Manuel Clouthier Carrillo que hoy es diputado federal.
Andrés Manuel López Obrador es el único que no niega su objetivo y quiere alcanzarlo en el 2018, porque “la tercera es la vencida”. En cierta forma le frenaron la cotidiana aparición en la televisión, desde la campaña del 2015 hasta hace unas semanas. Sin embargo, como presidente de Morena, su muy particular y privado partido político, continúa sus recorridos por la República y busca que sus simpatizantes le garanticen que votarán por él.
Como dos gobernadores terminaron su mandato sexenal e impusieron sus candidaturas, hoy tres de los que están en funciones no dejan de promoverse y también utilizan la televisión. Gastan millones de pesos, pero no importa, paga el pueblo. El priista Eruviel Ávila Villegas considera “ser mano”, porque su antecesor lo ha visitado, como Presidente de México, en casi cuarenta giras de trabajo. El de Ecatepec no deja ir a bodas, quince años, bautizos o a un velorio para hacerse presente.
El nieto del eminente neurólogo Manuel Velasco Suárez, Manuel Velasco Coello, es de los más jóvenes gobernadores. Está en Chiapas. Lo apoyó el Partido Verde Ecologista de México con la complicidad, perdón, en alianza con el PRI. Sus allegados afirman que es un buen prospecto para despachar en Palacio Nacional y habitar en Los Pinos. El neurocirujano Velasco Suárez gobernó en Chiapas, durante el régimen de Luis Echeverría Álvarez, postulado por el Partido Revolucionario Institucional.
Velasco Coello aprovechará, como ya lo está haciendo, la visita del Papa Francisco a San Cristóbal de las Casas. Su Santidad lo recibió en El Vaticano y hubo exposición de las artesanías chiapanecas, a lo cual se le dio amplia difusión televisiva. De dar solución a la problemática de la sureña entidad, que se encarguen otros.
Otro nieto, también de doctor y militar de alto rango, está muy activo para que lo consideren candidato presidencial en las filas del PAN. Rafael Moreno Valle Rosas, dejó el PRI para ser candidato a gobernador de Puebla respaldado por el PAN aliado con el PRD, Movimiento Ciudadano y el Partido del Trabajo. Su abuelo, el médico militar Rafael Moreno Valle siempre militó en el PRI, gobernando Puebla entre 1969 y 1972.
El poblano de 48 años afianza su precampaña presidencial con el oaxaqueño Diódoro Carrasco Altamirano, a quien recién nombró secretario general de Gobierno. Este hombre se inició en el gobierno de Heladio Ramírez López, en Oaxaca: después fue senador, gobernador y secretario de Gobernación, como priista y se convirtió al PANismo para ser diputado federal plurinominal. Dicen que su misión es doble: gobernar mientras su jefe hace campaña y coordinar los trabajos preparatorios para el 2018.
PREGUNTA PARA MEDITAR:
¿Después Vicente Fox Quesada y de Enrique Peña Nieto, los electores votarían por un candidato que saltara directamente de gobernador a Presidente de la República?
jherrerav@live.com.mx

Ver nota completa...

Suscríbete

Recibe en tu correo la información más relevante una vez al mes y las noticias más impactantes al momento.

Recibe solo las noticias más impactantes en el momento preciso.

La sucesión presidencial, no se detiene

Éste sitio web usa cookies con fines publicitarios, si permanece aquí acepta su uso. Puede leer más sobre el uso de cookies en nuestra política de uso de cookies.