Contexto Político
Por Efraín Flores Iglesias
Ante el cúmulo de inconsistencias detectadas en el conteo de los votos emitidos el pasado 6 de junio y el sospechosismo –Santiago Creel Miranda dixit– generado por los consejeros del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), el candidato de la coalición ’Va por Guerrero’ (PRI-PRD) a la gubernatura de la entidad, Mario Moreno Arcos, ha exigido puntual y enérgicamente certeza jurídica en los resultados electorales, sin demora y sin excusas, ni pretextos.
Sus opositores y/o malquerientes lo han satanizado por esa situación, pero legalmente está en su derecho de exigir transparencia y legalidad al proceso electoral en nuestra entidad.
El proceso electoral no ha concluido aún. Por lo tanto, no hay ganador ni gobernador electo hasta este momento.
El consejero presidente del IEPC, el añorvista Nazarín Vargas Armenta, actuó con total irresponsabilidad cinco horas después de haber concluido la jornada electoral, ya que dio a conocer que Morena era el partido que tenía en el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) la tendencia ganadora en la elección para renovar la gubernatura, cuando no se tenía información del 30 por ciento de las casillas que se habían considerado como parte de la muestra.
Nazarín Vargas se precipitó al dar a conocer los resultados de un ineficiente y costoso PREP, como si alguien lo presionara a entregar la gubernatura a Morena.
El PREP es un sistema que provee los resultados preliminares de las elecciones, ya sean locales o federales, a través de la captura y publicación de los datos plasmados por los funcionarios de casilla en las actas de escrutinio y cómputo de las casillas.
De acuerdo al Instituto Nacional Electoral (INE), el PREP permite dar a conocer, en tiempo real a través de Internet, los resultados preliminares de las elecciones la misma noche de la Jornada Electoral, con certeza y oportunidad y usando la tecnología más avanzada. Y el gran problema es ese, el software para el PREP que compró el IEPC resultó ineficiente, pues la captura y publicación de la información asentada en las actas de escrutinio y cómputo por los ciudadanos que participaron como funcionarios de casilla, fue muy lentísima.
O sea, no hubo certeza desde un principio por parte del IEPC. Y lo que es peor, el presidente de dicho órgano electoral dio un madruguete a la democracia y le faltó el respeto a miles de guerrerenses. Lo cual no se vale.
Mario Moreno ha señalado también que no está en contra de la ley y que, si los resultados no le son favorables, él mismo lo reconocerá como un demócrata comprometido por su estado.
En conferencia de prensa realizada la mañana de este miércoles en Chilpancingo, exigió una auditoría interna al PREP, así como la renuncia de los consejeros electorales, en tanto se deslindan responsabilidades sobre el atentado a la democracia en Guerrero.
Y pidió al INE asumir la responsabilidad sobre el conteo de los votos en el estado.
Insisto, Nazarín Vargas se apresuró en dar a conocer una ’tendencia’ de un conteo rápido con apenas el 72% de las casillas que integraron la muestra, lo que generó confusión total.
Lo que debe quedar claro es que los resultados presentados por el PREP son preliminares, tienen un carácter informativo y no son definitivos, por tanto, no tienen efectos jurídicos.
Es entendible que los dirigentes de Morena se opongan a la transparencia en el conteo de votos, ya que les urge que su impresentable personaje en Guerrero asuma en los hechos las riendas del poder, a tal grado que ya anda repartiendo cargos.
En 2006 y en 2012, Andrés Manuel López Obrador, el ídolo de un importante sector del país, reclamó el recuento de voto por voto y casilla por casilla, y nadie le impidió ejercer su derecho a recurrir a los tribunales.
Qué bueno que miles de guerrerenses hayan acudido el pasado domingo a votar por el candidato de su preferencia para la gubernatura, así como por los candidatos a diputados (locales y federales) y presidentes municipales.
También es necesario destacar que la jornada electoral se haya desarrollado sin violencia y que las corporaciones policiacas y militares hayan garantizado seguridad en las casillas.
ENTRE OTRAS COSAS… Es claro que en Chilpancingo la Red TG (Toño Gaspar) no apoyó a Alejandro Arcos Catalán.
Esos 25 mil integrantes (votos) que presumía tener a través de sus incondicionales, o apoyaron a la morenista Norma Otilia Hernández Martínez o se echaron a la hamaca para afectar al abanderado de la coalición PRI-PRD a la Alcaldía capitalina.
¿Impunidad para no ser tocado con el pétalo de una auditoría después de concluir su gestión?
El que traiciona una vez, traiciona dos veces.
Mejor los priistas le aportaron más votos a Arcos Catalán.
Pero de ese tema hablaremos con mayores detalles en una próxima entrega.
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