Contexto Político
Por Efraín Flores Iglesias
El alcalde con licencia de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva (MAL), se aferra en volver al Palacio Municipal. No quiere que el ferretero Jesús Tejeda Vargas (su suplente) concluya la administración 2015-2018. Y para eso le sigue causando dolores de cabeza al Congreso del Estado y a su partido, el Revolucionario Institucional.
En los primeros días del año que corre solicitó a los integrantes de la LXI Legislatura dar por terminada la licencia que solicitó el pasado 16 de octubre para regresar a despachar como alcalde de la capital guerrerense.
Recordemos que de manera sorpresiva irrumpió en el Palacio Municipal para anunciar su regreso, sin importarle que ahí se encontrara Jesús Tejeda –alcalde en funciones–, a quien saludó para aparentar que no tenía ningún problema personal con él.
Fue en ese entonces (8 de enero) cuando informó que había solicitado al Congreso volver al cargo y que su decisión se debió a los ’infundios permanentes del adversario político’ que utiliza ’la difamación y la calumnia como herramienta para conseguir sus fines sumados a la instrumentación y adelantar tiempos de auditorías’.
Y eso no fue todo.
Dijo que se enfrentaba ’a un aparato dirigido desde el ángulo más oscuro del poder en el estado… que utilizará métodos legales y extralegales para poner todos los obstáculos posibles’.
Era obvio que se refería al gobernador Héctor Astudillo Flores, a quien identificó como ’el príncipe’.
Por supuesto, MAL no cuidó las formas. Fue descortés con el mandatario estatal y con el Congreso local.
¿Y qué esperaba? ¿Qué le aplaudieran? ¡Claro qué no!
El que busca pelea, lo encuentra. Y así fue como inició el pleito entre el alcalde con licencia de Chilpancingo contra el Congreso del Estado; es más, ni los diputados de la fracción del PRI lo respaldaron.
MAL se quedó solo, sin aliados poderosos ni el Cabildo sumiso que un día encabezó.
Qué está en su derecho de regresar a la Alcaldía, claro que sí, pero hay formas de hacerlo.
Se supone que Marquitos –como le dicen algunos– tiene estudios en Ciencia Política y ha leído importantes obras de autores clásicos, por lo que no debería de cometer tantos errores en la praxis.
Si el Congreso local incurrió en alguna omisión, no le queda de otra que hacer el análisis correspondiente de la solicitud de licencia que presentó el polémico alcalde con licencia de Chilpancingo.
Faltan cinco meses para que las administraciones municipales electas en 2015 concluyan funciones, ya que a partir del 30 de septiembre asumirán funciones los que sean electos el 1 de julio.
MAL busca guerra. Quiere afectar a su partido en las elecciones. No se puede interpretar de otra forma su proceder.
Pero el tricolor tiene la culpa en postular hace tres años a tan cuestionado personaje, cuando había otros que tenían un mejor perfil para gobernar con humildad a Chilpancingo.
Leyva Mena afectará la campaña de Beatriz Vélez, y es algo que le preocupa a los generales del PRI en la capital, ya que el descontento social es evidente. Ni Chucho Tejeda ha podido con el paquete.
Tal parece que las auditorías realizadas contra MAL y las denuncias penales en su contra no prosperarán. La Auditoría Superior del Estado solamente espanta con el petate del muerto. Y el Cabildo capitalino, como siempre: mudo y entreguista.
Veremos en qué termina esta magnífica obra titulada: ’El regreso del MAL en Chilpancingo’, cuyos protagonistas principales son priistas. ¡Zas!
ENTRE OTRAS COSAS… El Partido Nueva Alianza (PANAL) va solo en la elección local. Sus dirigentes no quisieron o, mejor dicho, su nuevo gurú, no quiso llegar a acuerdos con las dirigencias del PRI y el PVEM.
El nuevo gurú es un ex militante del PRI y miembro de una familia con peso político en la entidad: Rubén Figueroa Smutny.
Resulta que el vástago del ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer ha logrado sumar al PANAL a ex alcaldes y ex diputados locales de diferentes partidos políticos, particularmente del PRI, PRD y PAN.
En otra entrega abordaremos el tema con mayor detenimiento.
Mientras tanto, ¡buen fin de semana, amables lectores!
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