De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Ricardo Monreal Ávila puede ser catalogado como el político con más amplia experiencia de cuantos hoy se sitúan en primera fila, especialmente con una gran concentración de cargos de elección popular y conocimiento de la actualidad.
Es cierto, no ha colaborado en la administración pública federal, pero ni falta le hace, con dos gobiernos ejercidos (gobernador y jefe delegacional) tiene suficiente para abrevar de la materia.
Doctor en Derecho, legislador de cepa, tres veces senador y varias más diputado, es un personaje de leyes que ha sabido construir y conciliar entre seguidores y opositores. Ha sido parte del priismo avasallador, se convirtió en rebelde y opositor y ganó desde la oposición al partido en que militó desde sus inicios. Formó parte del PRD como hoy lo hace en Morena, otro partido mayoritario y fue guía de grupos de minorías como el PT y MC.
Siendo un personaje conciliador no le ha importado remar contracorriente y por lo mismo no requiere de comprar conciencias para lograr acuerdos legislativos ni recurrir a los trucos que usaban dos personajes del priismo pasado que lograron créditos importantes como negociadores.
Monreal no juega al intelectual ni al erudito, pero si al político que sabe los tejemanejes de la actividad política en México y que viene desde abajo, construyendo su propia carrera, con algunos aliados.
La primera vez que fue diputado federal (88-91) abrevó de un hombre de leyes y político de cepa (José Luis Lamadrid) al que no le importaba cargarle el portafolio, con tal de aprender.
La segunda ocasión en que fungió como diputado estaba considerado el hombre de confianza del coordinador Arturo Núñez Jiménez en la primera legislatura que no fue mayoría el tricolor y con todo y su cargo de vicecoordinador renunció al partido y al cargo y se convirtió en candidato del PRD al gobierno de Zacatecas, donde obtuvo una victoria sin mácula, abriendo la puerta para que otros priistas siguieran sus pasos.
Su gobierno fue considerado como bueno en general, lo que le dio alas para pensar en una eventual candidatura presidencial en 2006, algo sumamente lejano por el crecimiento político de Andrés Manuel López Obrador, quien lo consideró como uno de los personajes importantes para la conciliación, ya que fue comisionado para dialogar con diversos grupos que buscaban el acercamiento con un candidato presidencial ya renuente a reunirse con grupos y personajes que no le habían manifestado lealtad con anticipación. El trabajo desarrollado por Monreal fue espléndido en una campaña sumamente difícil.
Tres años antes de la campaña presidencial, Ricardo Monreal había lanzado su primera advertencia, llegaré hasta el final en la disputa por la nominación presidencial, aunque no lo cumplió por la gran popularidad de López Obrador.
Después de coordinar los grupos legislativos del PT en el Senado y del MC en la Cámara de Diputados, Monreal Ávila regresó a sus querencias y fue jefe delegacional en Cuauhtémoc y compitió como aspirante al gobierno de la ya CDMX, donde quedó relegado.
Aquí vino la segunda advertencia: estaré en las boletas dijo el zacatecano, aunque no lo cumplió, ya que fue sembrado como primero en la lista plurinominal de Morena al Senado de la República.
Ahora, llega la tercera advertencia de Ricardo Monreal Ávila de que estará en las boletas presidenciales en 2024, aunque no aclaró si con el partido en el que milita actualmente o enarbolando los colores de otra organización política o incluso postulado por alguna alianza.
Monreal resulta en la actualidad como uno de los tres personajes políticos de Morena mejor ubicado al lado de Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard, por lo que de no ser aprovechado por Morena podría encabezar otro partido o una mega alianza.
Basta recordar que Ricardo Monreal mantiene vínculos con un grupo de políticos que continúan teniendo adeptos como Dante Delgado de MC y Alberto Anaya del PT, además de construir acuerdos con Manuel Velasco con PVEM y como si fuese poco, dentro de su grupo de amigos cercanos se encuentran José N. Murat Casab, de la Fundación Colosio y Arturo Núñez Jiménez, cuya presencia dentro del PRD continúa siendo importante.
Solamente hay que esperar que en esta ocasión, Ricardo Monreal Ávila cumpla con su palabra y llegue a estar en la boleta presidencial para bien de sus seguidores. Serán tres años arduos del todavía coordinador de los senadores de Morena.
*****
Aprovechando la barata de candidaturas a largo plazo, la panista Xóchitl Gálvez Ruiz aprovechó el momento para lanzar su proclama de competir por el gobierno de la CDMX
Poco o nada de efecto tuvo la hidalguense ni dentro ni fuera de su partido, ya que los dados parecen cargados con anticipación para Jorge Romero, quien habrá de coordinar la bancada de Acción Nacional en la Cámara de Diputados y se declara el artífice de los triunfos en la CDMX.
ramonzurita44@hotmail.com
