Algunos asistentes mencionaron que en días anteriores habían sido muy permisibles con comerciantes que incumplen con las medidas de sanidad, pero a pesar de los reclamos, la fiesta fue suspendida
Tremendo disgusto y temor sintieron las madres de familia y niños que, a pesar de la prohibición por las medidas sanitarias preventivas que se llevan a cabo para evitar contagios de Covid-19, celebraban una fiesta infantil en la comunidad de Arenal de Álvarez, en el municipio de Benito Juárez, la cual, fue suspendida por policías municipales.
El lunes durante la tarde noche la corporación recibió una llamada, donde los vecinos de esa comunidad reportaron una fiesta en una de las calles del pueblo, fiesta que aglomeraba a decenas de invitados, en su mayoría niños que se encontraban cerca de adultos sin las más mínimas medidas de protección como es el uso de cubrebocas o la aplicación de gel antibacterial en las manos.
De inmediato una patrulla de la policía acudió al lugar y encontró la fiesta con más de 50 personas. De inmediato se acercaron a la piñata y pidieron a los papás de la festejada que terminaran el festejo y pidieron a los invitados que se retiraran, esto, como medida sanitaria para evitar la propagación de la enfermedad que hasta ese día había alcanzado cifras de 123 casos confirmados y cuatro decesos.
Algunos de los invitados se asustaron, principalmente niños, otras mamás se disgustaron, quienes mencionaron que en días anteriores habían sido muy permisibles con comerciantes que incumplen con las medidas de sanidad, pero a pesar de los reclamos, la fiesta fue suspendida.