El día bisiesto comenzó en el año 49 A.C. cuando Julio César llegó a Egipto y encontró un excelente calendario de Cleopatra mientras que el del mandatario tenia demasiados desfases. Fue entonces que le encomendó a Sosígenes de Alejandría, astrónomo filósofo y matemático, el desarrollo de un calendario juliano. Este calendaría poseía 365 días y un día extra cada cuatro años para compensar un desfase natural.
En 1582 el calendario Juliano fue sustituido por el gregoriano y se ajustó el desfase que existía en ese momento. Actualmente los años poseen 365 días, 5 horas y 49 minutos para mantener el equilibrio cada cuatro años pasan de tener 365 días a 366.
El calendario romano causó que el año 46 a.c se convirtiera en el año más largo registrado en la historia, contando 455 días para iniciar nuevamente desde cero. Se le llamó ’año juliano’ o el ’año de la confusión’.