Comentario a Tiempo
Teodoro Rentería Arróyave
Quién nos hubiera adelantado que estaríamos saludando, por la perspectiva de paz en Colombia, la reelección de Juan Manuel Santos, el antiguo titular de la fuerzas armadas del entonces Presidente, siempre bélico, Álvaro Uribe.
El resultado de la segunda vuelta, que otorgó un triunfo indiscutido por cuatro años más al presidente Santos, es de destacarse que fue sobre el alfil de Uribe, de nombre Óscar Iván Zuluaga, que juntos ha creado una corriente, “el Uribismo”, con fuerte presencia en todo el país.
Como es de esperarse, ese grupo de derecha, que siempre le ha apostado a la exterminación de los grupos guerrilleros, posición absurda que ha prolongado por más de medio siglo el conflicto armado, representa desde luego un obstáculo para el nuevo Gobierno de Santos, pues conservó la mayoría en el Senado de la nación.
Como se recordará, y es de tomarse muy cuenta para el futuro de los acontecimientos en la nación sudamericana, en la primera vuelta Iván Zuluaga se impuso a Santos, aunque con un margen estrecho de apenas 500 mil votos.
Ahora la distancia es muy amplia a favor de Santos, pues ganó con más del 50 por ciento de los votos totales, contra 46 de su oponente; aún así, es de coincidirse con la mayoría de los analistas, que el país se dividió, y dependerá de los cambios y de las nuevas estrategias que imponga el mandatario, para convencer que la paz es lo sustancial y los más importante para su futuro.
No obstante que el gobierno de Santos ha mantenido a esta nación en una impresionante tasa de crecimiento del cuatro por ciento, seguramente porque los colombianos lo ven como algo natural a su esfuerzo y pujanza; repetimos ahora, de lo que se trata es ganarse a la otra casi mitad de la nación, que vale vivir en paz.
José Manuel Santos contó con el apoyo de otros partidos que habían participado en la contienda presidencial, convencidos, como lo declararon, de que las negociaciones de paz entre la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, las FARCs, que se llevan a cabo en la Habana, Cuba, es el camino cierto para la integridad de la nación.
Sin embargo, es de resaltarse que la actitud radical de Uribe ha permeado en esa parte de la sociedad, que inclusive les escuece el alma que las negociaciones se lleven a cabo en la Cuba de la Revolución Castrista. Sienten que la isla, al concretarse la paz, será parte del éxito.
Ante esa actitud, la promesa de Santos es iniciar de ya, también, pláticas de paz con la otra guerrilla el Ejercito de Liberación Nacional, el ELN.
Saludamos el triunfo del Presidente José Manuel Santos, y estamos de acuerdo con su declaración inmediata después de conocer de su victoria: "los colombianos no votaron por un candidato, sino por un sueño compartido: la paz".
Periodista y escritor, Secretario de Desarrollo Social de la FELAP, Presidente fundador y vitalicio honorario de la FAPERMEX, ex presidente del Club Primera Plana. Agradeceré Sus comentarios y críticas en teodoro@libertas.com.mx, teodororenteriaa@gmail.com Nos escuchamos en las frecuencias en toda la República de Libertas Radio. Le invitamos a visitar: www.felap.info, www.ciap-felap.org, www.fapermex.mx, y www.clubprimeraplana.com.mx
